"Vivimos encerrados bajo llave porque tenemos miedo de salir”

Cansados de la inseguridad, un grupo de vecinos del barrio Jardín del Sur de Villa Mercedes solicitan más presencia policial y el arreglo del alumbrado público faltante en varios sectores. Aseguran que la zona está cada vez más peligrosa sin importar si es de noche o de día y temen salir de sus viviendas por miedo a sufrir un hecho delictivo.

Ana María es parte del grupo de residentes que está preocupado. Comentó que a pesar de que el Gobierno entregó nuevos móviles policiales, solo los ve por el centro y no por su barrio. “Muy de vez en cuando pasa alguna patrulla, pero casi nunca. Cuando los hemos llamado por alguna emergencia o situación, nos han dicho que no tienen nafta y si queda un policía solo en la comisaría, nos dicen que no la pueden dejar sola”, expresó la mujer.

Natalia, otra de las vecinas que está preocupada por la inseguridad, le dijo a El Diario de la República que hay una comisaría a dos cuadras de su casa, pero que aun así no los asisten como deberían.

“Antes podíamos salir a comprar en cualquier momento y no pasaba nada; ahora ya nos da miedo. Lamentablemente, no puedo salir tranquila a la calle en mi propio barrio. Tipo 22 ya me tengo que encerrar”, manifestó Natalia.

“Antes no era tan peligroso. Tenemos que vivir encerrados bajo llave porque tenemos miedo de salir”, agregó Liliana.

Las tres mujeres coincidieron en que los hechos delictivos aumentaron de forma considerable desde que inauguraron el “barrio nuevo”, como lo mencionaron ellas al 365 Viviendas.

“Una noche, a la semana de que entregaron el nuevo complejo habitacional, mi hijo vio a un hombre encapuchado a punto de robarles las herramientas que estaban dentro de nuestra camioneta, que en su momento la dejábamos afuera y ahora tenemos que entrarla y cerrar todo con llave y candado”, relató Natalia.

Liliana reveló que una de las zonas principales del barrio está totalmente oscura. Indicó que falta luminaria sobre la calle Héctor Aubert y algunos pasajes cerca de esa arteria.

“Hemos reclamado de muchas maneras lo del alumbrado público, pero no nos resolvieron nada”, sostuvo la vecina y añadió: “En plena siesta le robaron la luz de afuera a una mercería y a una rotisería cerca de mi casa”.

Según relataron las vecinas, colocar un sistema de seguridad es bastante costoso y solo una cuenta con una cámara que compró hace varios años, pero las otras dos no.

“Yo quise poner una cámara, pero no pude, porque es muy caro y la verdad es que es mucho presupuesto”, concluyó Liliana.