"Johana solo hablaba de la violencia que sufría de parte de Solalinde", dijo una testigo

Una mujer, quien iba al mismo gimnasio que la víctima, aseguró que Galdeano le contó que el acusado la golpeaba, que la seguía por GPS y una vez la hizo vigilar con un amigo que envió al gimnasio.

El segundo día de audiencia en el juicio contra Juan Carlos Solalinde arrancó. Entre los primeros testigos de una tanda de 12 previstos para este martes, declaró Yesica Tobares, con quien la víctima charlaba cuando iba al gimnasio. Dijo que, en los apenas dos meses que habían empezado a dialogar, Galdeano prácticamente solo se refería a la violencia que sufría de parte del acusado y vivía con miedo porque el hombre la perseguía.

La testigo indicó que comenzó a charlar con la víctima unos dos meses antes del femicidio. Pero aclaró que aparte de ella la joven asesinada no se relacionaba con mucha más gente en el gimnasio porque "tenía miedo hasta de generar una nueva amistad".

Le contó que Solalinde una vez envió a unos hombres a "pegarle tiros a la casa" de un chico llamado Franco solo porque ella se había tomado una foto con él.

Relató que la víctima quería vender su auto, pero que no podía porque el imputado la había amenazado con que se lo iba a quemar.

Tobares narró que una vez presenció el hostigamiento y persecución que sufría Galdeano. Sucedió en el gimnasio, que antes estaba ubicado por calle San Martín, la semana anterior al crimen, poco antes del 18 de mayo de 2021.

Dijo que el "turco Abraham", un amigo policía de Solalinde, entró al gimnasio y estuvo dos horas vigilando a la víctima. "Tardó dos horas en irse y recién ahí pudimos salir", precisó.

En otro pasaje de su declaración, recordó que un día vió a Galdeano con un hematoma. Aunque la joven no le dijo nada sobre una paliza, la testigo notó que tenía el rostro golpeado, algo que trataba de tapar con maquillaje.