La ex de Churquina afirma que en Pampa de las Salinas lo torturan

Nuevamente, el nombre de Rafael Dante Churquina surge en torno a escándalos en el Servicio Penitenciario Provincial. Esta vez, fue su expareja y madre de una de las tres hijas de Churquina quien mencionó el apellido del condenado de 39 años. Denunció que el detenido sufre condiciones de detención irregulares, que "sufre tortura psicológica en la cárcel" y que hasta se "cosió la boca porque lo tienen secuestrado solo en un calabozo del pabellón 3".

El condenado fue trasladado el 13 de marzo al complejo penitenciario Pampa de las Salinas, en La Botija. En aquel entonces, la titular del Servicio Penitenciario provincial, Karina Mantelli, dijo que la resolución no tendría que ver con el hallazgo de teléfonos y una agenda en la celda que ocupaba en la cárcel de San Luis, sino que fue adoptada para "optimizar el régimen penitenciario tendiente a buscar mejores resultados médicos, tratamientos y actualización del mismo”.

Pero los dichos de Ángeles contradicen a Mantelli. La mujer sostiene que Churquina fue trasladado de manera abrupta y sin previo aviso a Pampa de las Salinas.

Ángeles también detalló abusos sistemáticos, incluido el aislamiento extremo, la negación de artículos personales y educativos, y el sometimiento a humillaciones diarias como ser filmado desnudo. "Ha llegado al punto de coserse la boca en protesta y amenaza con autolesionarse más gravemente si su situación no mejora", dijo la mujer en una entrevista radial con Lafinur FM.

Asimismo, en diálogo con un cronista de El Diario de la República, Ángeles sostuvo que al padre de su hija solo le permiten comunicarse con sus familiares 10 minutos por semana y en presencia de los penitenciarios, quienes "escuchan todo el tiempo".

Churquina está acusado de narcotráfico, pero aún no ha sido condenado por este delito específico. Ángeles mencionó que él está procesado a nivel federal y que el penal de La Botija no es apto para la reclusión de procesados federales.

Además, denunció que la supuesta posesión de una notebook que utilizaba para operar desde la cárcel es incorrecta; "en realidad, era un DVD portátil", dijo en otro pasaje de la charla.

Además de precisar que Churquina quiere "hablar con los medios de comunicación y contar lo que sabe", Ángeles se refirió también a su preocupación por el impacto en su hija y la imposibilidad de mantener un vínculo normal con su padre debido a las restricciones de comunicación y visitas.

El pedido de Ángeles es para que Churquina sea tratado como un interno normal, con acceso a derechos básicos como educación, ejercicio y comunicación regular con su familia. "Ahora está aislado en un calabozo, lo sacan una hora por día para que se bañe y solamente tiene 10 minutos de comunicación telefónica por semana con la familia".

Finalmente, se explayó sobre un pedido que impulsa a través de la Secretaría de Derechos Humanos referido a la necesidad de atención psicológica y un trato humano para su expareja, y resaltó que, aunque acusado, aún no ha sido condenado y merece condiciones de detención justas.