Vergés echó a una histórica dirigente del adolfismo

Siguen las luchas internas en el adolfismo. Alicia Arrieta, histórica dirigente de este espacio político, fue echada por Alfonso Vergés de la Dirección de Organización y Gestión que depende del Ministerio de Ciencia e Innovación de San Luis. La funcionaria desvinculada apuntó contra el ministro de esta cartera, acusándolo de ser un “violento” que “me empujó al abismo de manera permanente”.

“Me costó la cabeza reclamar por mis compañeros”, señaló Arrieta en un posteo que difundió este miércoles en sus redes sociales, al tiempo que subrayó que “los momentos de violencia que tuve que soportar son terribles”. Además, confirmó que dejó de pertenecer a Todos Unidos, el movimiento encabezado por Adolfo Rodríguez Saá.

“Me saca un ministro violento. No puedo hacer denuncia por su acercamiento con las de Ni Una Menos. No soy cómplice de la violencia de nadie, menos por un sueldo, mucho menos cuando mienten para sacar a quienes entregamos la vida en la lucha. Un violento no me silencia”, aseguró.

Vergés asumió como ministro de Ciencia e Innovación a principios de junio después de que el cargo hubiera permanecido vacante durante seis meses, en un notorio ejemplo de desprolijidad institucional del gobierno de Claudio Poggi.

La cartera estaba destinada para ser ocupada por un dirigente de Todos Unidos, debido a que fue incluido dentro del “cambio de figuritas” que derivó del acuerdo electoral que celebraron el poggismo y el adolfismo para ir juntos como alianza en los comicios provinciales del 2023.

Por postulaciones iniciales de dirigentes del adolfismo que no terminaron de convencer, y a diversas marchas y contramarchas, el ministerio de Ciencia e Innovación había quedado sin que nadie lo dirigiera. El ministro de Hacienda, Néstor Ordoñez, estuvo a cargo del área de manera interina.

Verges, exintendente de la ciudad de San Luis, estuvo  previamente como director en Ciencia, pero tras la salida escandalosa de la Secretaría de Actividades Logísticas de Harold Bridger, acusado de corrupción y de malos manejos incluso desde el mismo adolfismo, fue trasladado a esta repartición. Su último cargo antes de llegar al ministerio fue como director de Comercio Exterior.