La noche de las sorpresas

La primera de las sorpresas que Rodrigo Tapari le regaló a su público en el recital del sábado a la noche fue en el ingreso. El cantante entró al salón del Cine de Teatro San Luis por la puerta de acceso al público, micrófono en mano, agente de seguridad cerca, y saludó a todos los que le tendieron la mano.

A partir de ese inicio, el show contó con muchísimas situaciones inesperadas, la mayoría producto del acercamiento que el artista propone con su público y con sus colegas. Rodrigo explicó que la gira teatral que lo trajo a la provincia tiene como objetivo que todos sus admiradores tengan la chance de acercarse y sacarse una foto.

Ese anuncio se hizo realidad durante la noche, que terminó con seis chicos y adolescentes bailando arriba del escenario. 
Pero antes de ese momento, las situaciones que generó Tapari fueron absolutamente inesperadas y por ende sorpresivas para un recital de este tipo. 

Luego de hacer algunas canciones con su muy prolija orquesta (“La fuerza del engaño”, “Una cerveza”, “Hasta que me olvides”, “El rey”), el artista anunció a su primer invitado, Enzo “El Hueso” Flores, quien hizo “No te vayas”, de “Ráfaga”. “Este chico debería tocar en Cosquín mañana”, dijo Rodrigo en el escenario y resaltó el perfil folclórico del puntano. 

La segunda artista local que subió fue Cecilia “Beba” Mirabile, recordada por su participación en “La voz argentina” en el 2022. La generosidad de Tapari no se evidenció solamente por el hecho de generar un espacio para sus colegas puntanos sino también para permitirles que brillen con luz propia. De hecho a “Beba" le permitió que hiciera una canción a capela porque la que habían ensayado, “Fue difícil”, “le queda un poquito baja”.

Pero el momento de mayor emoción entre los invitados llegó con la participación de Gaspar Gigena, quien conoció a Tapari en “Canta conmigo ahora", el programa de Marcelo Tinelli en el que el joven puntano tuvo una destacada labor. Juntos revivieron un momento muy especial para ambos durante el ciclo al interpretar “Fue culpa de los dos”. 

“Esta canción no estaba entre las favoritas del público cuando Gaspar le pidió en medio del programa a Tinelli cantarla conmigo. A partir de ese momento se hizo viral y ahora es una de las más pedidas en los recitales”, dijo Tapari, quien no se cansó de elogiar al joven. “Lo admiro profundamente. Cuando abrió la boca por primera vez en el programa, escuché a un ángel”, dijo Rodrigo de su invitado. 

Además de elogiar el Cine Teatro teatro y de ocupar unos 10 minutos a hablar de su conocida reconversión a la fe, el músico continuó con su plan de sumar invitados. En la segunda tanda, le preguntó al público si alguno se atrevía a cantar. 

Para ese momento del recital, además de algunos problemas severos de sonido, el ex “Ráfaga" había superado cientos de pedidos de fotos y había bajado dos veces del escenario para cantar más cerca de su público.

Tobías, uno de los chicos que se animó, pidió que lo pellizcaran para que comprendiera que lo que estaba viviendo no era un sueño. Mónica, otra cantante amateur, recordó que el año pasado también accedió a la invitación y le contó la difícil historia de su hija. “Ahora la pude traer para que te conozca”, le dijo al carismático cantante. 

Pero de todos esos invitados, quién se robó la atención fue Germán Herrera, el cantante de “Chicos mentha”, quien sin ningún tipo de pudor tomó el escenario como si fuera suyo, pidió al tecladista que le tirara un Si bemol, hizo sus típicos pasos, arengó a la gente y se animó a su propia versión de “Una cerveza”. “No le pudimos seguir la coreografía” bromeó el trompetista de la banda. 

Al tomar nuevamente el control del escenario, Rodrigo hizo un mix de “Ráfaga", repitió halagos a la provincia, hizo subir al escenario al peluquero que le había cortado el pelo a toda la banda esa misma tarde, repitió “Una cerveza” y se retiró con la promesa de volver.