Un exempleado del Ramón Carrillo habló de los despidos y la inacción de ATSA

Desde hace meses, el escenario en el Hospital Central “Dr. Ramón Carrillo” es deplorable. Despidos, persecuciones, son algunos de los ribetes de una administración que tiene el objetivo de llevarse puesto todo por delante. Matías Miranda, extrabajador del establecimiento sanitario, contó en primera persona las peripecias y las inacciones de la seccional local de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA).

“Fui trabajador del Ramón Carrillo hasta hace 4 meses atrás. Fuimos al gremio cuando me quisieron despedir, hablamos con Gerónimo Ortiz (secretario Adjunto de ATSA) y nos dijo que en estos casos no se puede hacer nada, que este tipo de rescisión de contrato es irreversible. Nos dijo que iba a hablar con el director (Adolfo Sánchez León) y nunca se presentó”, expresó Miranda en diálogo con “A la vuelta”, por FM Lafinur.

En ese momento, se trató de un total de 18 personas despedidas sin causa. “El gremio no nos defendió, nos soltó la mano y nos dejó a la deriva”, lamentó. La bronca de los despedidos no es para menos, remarcan que Ortiz no se ofreció ni siquiera para presentar una carta o tomar alguna medida en favor del personal. En todo momento se excusó en lo “irreversible” de la situación.

Miranda se refirió a Ortiz a instancias de manifestaciones que el dirigente gremial vertió en un medio oficialista, donde apuntó que lo que se dice del Hospital Central y los despidos son “mentiras” e insinuó que antes se vivían “negociados”.

“Su función es defender a los trabajadores y no la está cumpliendo. Él sigue cobrando como enfermero y nunca ejerció. Sale diciendo que hay negociados detrás y no los estaría viendo, los estoy viendo con él a los negociados”, aseveró.

Miranda remarcó que los únicos que los acompañaron en las difíciles instancias durante las desafecciones fueron los referentes de ATE, que los ayudaron con el pedido de una audiencia y estuvieron firmes en todo momento.

“Ortiz dice que no hay persecución. Tengo muchos conocidos en la institución y están trabajando con miedo, es una sensación horrible, tienen a los jefes de servicio hostigándolos, hacen persecución laboral. Tienen miedo a los cambios de servicios, van rotando hasta hacerlos llegar al hartazgo. Te invitan a irte. Eso ha pasado con personal médico, con equipos de trabajo de toda la vida. La guardia de adultos de toda la vida fue desarmada íntegra”, repudió.

Sobre el cierre de la charla, cuestionó el manejo de los sueldos, donde advierte desfasajes entre el personal de la carrera sanitaria y los profesionales que traen de afuera. “Al personal que tenemos en la provincia no lo cuidamos, se van. Todo el sistema de salud está roto, como lo encontramos ahora”, apuntó.

Redacción.