Violó la domiciliaria, fue a la cárcel y ahora asumió haber matado a Esquivel

El jueves pasado, Ezequiel Becerra asumió toda la responsabilidad del asesinato de Cristian Esquivel, un reconocido tatuador de San Luis. Becerra, que tenía 17 años el 22 de febrero último cuando Esquivel fue atacado a metros de la Jefatura Central de Policía, declaró ante el juez de Garantías Marcos Flores Leyes, intentando exculpar a su hermano mayor Omar Becerra, quien también está detenido. Sin embargo, para la Fiscalía de Instrucción 1, a cargo de Francisco Assat Ali, esto no cambia nada: ambos hermanos siguen siendo considerados sospechosos de haber actuado en conjunto y como coautores del crimen. 

La situación se agravó cuando Ezequiel, que debía permanecer bajo custodia policial en su domicilio, decidió escapar el 5 de julio pasado. La fuga, reportada por una vecina que lo vio saltar una medianera, desató un operativo policial que culminó con su recaptura en el barrio Tibiletti. Este incidente provocó que la jueza en lo Penal Juvenil y Contravencional Daniela Benenati revocara la prisión domiciliaria y ordenara su traslado inmediato al penal.

El jueves pasado, Ezequiel Becerra, conocido hasta ese momento como L.B., se presentó ante el juez de Garantías Marcos Flores Leyes y asumió toda la responsabilidad del asesinato de Cristian Esquivel, ocurrido el 22 de febrero. Becerra intentó exculpar a su hermano mayor, Omar Becerra, quien también está detenido, declarando que fue él quien apuñaló a Esquivel. 

Según la declaración de Omar, la noche del 22 de febrero ambos hermanos llegaron a la intersección de Héroes de Malvinas y Riobamba, en San Luis, donde se reunieron con Esquivel. Mientras los tres caminaban, Esquivel y Ezequiel se separaron hacia un lugar menos iluminado. Poco después comenzaron a discutir y Ezequiel lo apuñaló con lo que se cree fue un cuchillo. Omar Becerra relató que su hermano le había contado que se habían reunido con Esquivel el 21 de febrero al mediodía en el Hotel Dos Venados, donde planificaron el encuentro que culminó en tragedia.

De acuerdo a la teoría presentada por el fiscal Francisco Assat Ali, los hermanos Becerra intentaron robar a Esquivel, pero al no poder lograrlo debido a la resistencia de la víctima, el menor de los dos reaccionó violentamente, apuñalándolo siete veces y provocándole la muerte por un shock hipovolémico. “El homicidio fue motivado por el fracaso del delito. Los imputados intentaron sustraerle elementos al señor Esquivel, y al no poder hacerlo, le propinaron siete puñaladas que le causaron la muerte”, explicó Assat en la audiencia del sábado pasado.

El brutal ataque a Cristian Esquivel ocurrió en la madrugada del 22 de febrero de 2024, a escasos metros de la Jefatura Central de Policía y de su casa, ubicada en la calle Riobamba al 900 frente a la Plazoleta de la Paz, en San Luis. Esquivel fue hallado gravemente herido en la vereda norte de Héroes de Malvinas al 500 y murió poco después en el Hospital “Ramón Carrillo” mientras los médicos intentaban salvarle la vida.

El 24 de febrero, dos días después del asesinato, los hermanos Becerra fueron detenidos en un operativo policial en su domicilio del barrio La Vecindad. Omar Becerra fue trasladado a la Comisaría 3ª, mientras que Ezequiel, por ser menor de edad en ese momento, fue derivado a un centro de menores.