“Regalón penitenciario” denunciado por acoso sexual

La Policía y el Servicio Penitenciario de San Luis siempre son una usina de rumores, que se agigantan cuando hay un ocultamiento de información, una de las características más evidentes del nuevo gobierno provincial.

Esta vez, el escándalo sacude al Complejo Penitenciario N°1, donde un alto funcionario del sistema carcelario, de extrema confianza de la directora del Servicio Penitenciario, Karina Mantelli, y de la ministra de Seguridad, Nancy Sosa, fue denunciado por acoso sexual y, en consecuencia, removido de su cargo.

Según trascendidos que surgieron desde adentro del propio Servicio Penitenciario, el acusado, quien hasta hace poco recibía elogios y condecoraciones de Mantelli, Sosa y del jefe de Policía, Pablo Vieytes, fue denunciado por una subalterna perteneciente al cuerpo especial que dirigía. La mujer habría elevado su queja a las autoridades internas, pero al no encontrar respaldo, optó por presentar la denuncia en la Fiscalía.

El hecho denunciado no fue solo un hostigamiento verbal, sino que habría pasado a mayores, lo que motivó la intervención judicial. Como resultado de la exposición, el oficial fue apartado de su puesto y reemplazado, de manera urgente y sin anuncios oficiales, por una mujer con el grado de adjutor principal, según consta en la orden de servicio N°39 DG-SPP 2X.

La designación de la nueva jefa de Cuerpo Especial de Operaciones Penitenciarias se concretó en el día de la fecha, marcando un brusco cambio en la cúpula del sistema carcelario. Mientras tanto, el funcionario desplazado fue pasado a disponibilidad y se espera que la investigación judicial determine su situación.

El hermetismo con el que el gobierno maneja estos temas solo alimenta la suspicacia y el descontento dentro de la fuerza, donde cada día crecen más los cuestionamientos sobre el manejo de la seguridad en la provincia.