San Luis: vecinos de la zona oeste piden que se declare la "emergencia hídrica"

El drama del agua en los barrios de la zona oeste de la capital puntana está en su punto límite. La gente ya no aguanta la situación, en medio de jornadas con altísimas temperaturas y necesidades elementales que no pueden suplir. Piden a gritos la ayuda de las autoridades, pero no tienen respuestas. Apenas consiguieron que la Municipalidad lleve camiones cisterna para repartir agua cruda, pero el recurso no es apto para el consumo. Apuntan que el escenario reviste una actitud "inhumana". Reclaman la "emergencia hídrica". 

"Siguen las dificultades. La estamos pasando mal. El agua que nos dan no se puede ni tomar, ya hay varias personas que están enfermas", expresó con indignación Tomas, un vecino damnificado. De acuerdo a lo que comentó en diálogo con El Diario de la República, como no tienen tanques de agua el personal municipal les llena diferentes recipientes. Varios cuentan con tachos de 200 litros, en algunos casos les llenan dos tachos por tanda. Eso les dura como máximo dos días. Lo usan para higienizarse, para limpiar, para lavar los platos, para lavar la ropa, entre otras necesidades básicas. 

"En mi caso hace 8 días que estoy sin agua, pero hay otros que no tienen desde hace dos semanas, incluso hay vecinos que tienen el problema desde hace un mes. Recién aparece Agustín Hissa (Coordinador General de Servicios Públicos y Mantenimiento y Movilidad) porque le fuimos a cortar la calle. Tenemos que hacer lío para que nos escuchen. Somos un barrio al que nos dijeron que le iban a poner cloacas, cañerías para el agua, que iban a arreglar la luz. Y nada pasó, parece que somos todos tontos", lamentó. 

Según indicó, el hartazgo crece ante la falta de medidas y soluciones. Les preocupa de sobremanera lo que ocurre con los niños, que son los que más sufren la problemática. "Esto es abandono de persona, es inhumano", repudió.

"Como si fuera poco, a los problemas del agua se suma lo que pasa con la luz. Los cables están conectados así nomás, son conexiones que hicieron los vecinos. Se queman heladeras, televisores. Necesitamos una respuesta del intendente y de Poggi, que den la cara como la daban cuando salían a tomar mates con la gente y prometían todo. No arreglaron nada", aseveró.

Agua potable, con urgencia

Graciela "Kitita" Merenda, una reconocida vecina del barrio República, contó que ya han presentado una nota al Municipio -por lo que se generó un expediente-que no tiene respuestas. Detalló que el primer día de corte, se comunicó Agustín Hissa diciendo que al día siguiente les iba a dar una respuesta y que iba a verificar dónde estaba el problema. Si bien el funcionario concurrió a la barriada, no hubo una solución concreta. 

En voz de la gente, desde la Comuna les dicen que el inconveniente se encuentra en un caño y responsabilizan a la empresa que concretó las obras. Al mismo tiempo, desde la empresa les indican que eso no es así. Entre dimes y diretes, adultos y niños son rehenes de la impericia. 

"Sabemos que todo San Luis no tiene agua pero necesitamos que declaren la emergencia hídrica en el barrio. No sale agua ni en el día ni en la noche. SerBa abre llaves por manzana pero al rato las cierran, parece que fuera un juego. Le dije al ministro de Desarrollo Humano, Gustavo Bertolini, que necesitamos que nos ayuden con un bidón de 6 litros de agua mínimo todos los días para hacer la comida, para prepararle la leche a los bebés, para tomar una medicación. Seamos más humanos, entiendan que el agua que nos están abasteciendo es de olor nauseabundo, tiene color amarillo y no es potable", señaló.

"Necesitamos la emergencia hídrica. Un niño no puede estar sin tomar agua, sin bañarse. Pensarán que los niños pueden bañarse con agua sucia. Esto es abandono de persona. Sé que en San Luis está todo mal, nosotros peleamos por nuestro barrio. Necesitamos lo básico: agua potable", agregó.

Merenda graficó que el drama no solo se vive en el barrio República, sino que también se registran innumerables casos en el barrio Primero de Mayo, en el V Centenario y en el 9 de Julio. 

"No hay derroche de agua. A las personas que no son del barrio les pedimos que entiendan, sean empáticos, pónganse en nuestro lugar y piensen qué harían si no tienen agua para los animales, para lavar la ropa, para los niños,para lavar, para cocinar", concluyó.