Hay que mirar la Policía

El Gobernador le pidió la renuncia al jefe de la Policía, al subjefe y a toda la Plana Mayor. Y anunció que se tomará un tiempo para considerarlo. Está bien hacer una mirada sobre la Policía, porque tiene una tendencia a formar corporación. Se convierte en un cuerpo que no rinde cuentas a nadie, se siente no controlado, no mirado y no deja que lo controlen, ni que lo miren.
A la Policía le dimos las armas. El pueblo de San Luis dijo: “¿Quién nos cuida a nosotros?” e inventó la Policía. Y le dijo: “Ustedes pongan las armas y nosotros les vamos a pagar para que nos cuiden. Les pagamos los estudios, les damos las armas y los móviles policiales”. La Provincia también le dio viviendas a la Policía. Todo lo hizo para que nos cuiden, no para que hagan una corporación cerrada y que no rinda cuentas a nadie.
A los muchos delitos se suma la entrada de narcotráfico a San Luis. Hay señales evidentes. Ayer dos mujeres jóvenes, en una moto, portaban armas y un kilo de droga. ¿Cómo es posible? ¿Nadie se da cuenta, nunca nos dimos cuenta? ¿No hay inteligencia sobre esto? ¿No sabe nada la Policía? Si no lo sabe es porque son bobos. Pero si se dan cuenta, es otra cosa.
No se puede tener una Policía que no entienda, que no sepa, que no haga las cosas bien o que esté involucrada con el delito.
Que el Gobernador de San Luis ponga su mirada en la Policía está muy bien. Ojalá el Gobernador, los ministros, los diputados, el partido gobernante, la oposición, con mucha seriedad, pusieran su mirada. Porque la Policía nos tiene que cuidar a todos, sobre todo los más débiles, a los más viejitos, a los más humildes, a los niños.
La Policía debe pensar todo el día en que no se produzcan delitos, en la prevención. Pero si se produce semejante cantidad de delitos, están pensando mal. Y si piensan mal, hay que mirarlos.
Si no hay información y los delitos suceden porque no se dan cuenta, hay que cambiar y poner a los que sí se dan cuenta. Y si se dan cuenta, pero igual pasan estas cosas, es porque quizás están metidos en el delito y eso es terrible.
Hay que mirar la Policía, ver las carpetas, los antecedentes y terminar con las peleas internas, con los enfrentamientos.
La Policía de San Luis, frente a la cantidad de delitos que hay, se ha convertido en inservible o corrupta. No puede haber tal cantidad de delitos, no puede estar entrando el narcotráfico a la Provincia de San Luis. El pueblo de San Luis no se merece que, por una Policía inservible o corrupta, esté el narcotráfico en la puerta de la provincia. ¿Qué más hace falta para demostrar que esto sucede?
Me parece bien que el Gobernador se haya dado cuenta de esto y tomara esta medida de pedir las renuncias.