Una particular visita cultural sorprendió a algunos afortunados puntanos

“Que el diccionario detenga las balas” como canta el enorme Joaquín Sabina en su cada vez más certera letra de “Noches de boda” parece ser la premisa de Raúl Lemesoff, un artista que convirtió un viejo Ford Falcon verde que perteneció a las Fuerzas Armadas en una biblioteca motorizada con forma de tanque de guerra.
Esta particular “Arma de instrucción masiva”, como la llamó su creador, visitó de improvisto las calles de San Luis y regaló cultura a algunos afortunados que tuvieron la suerte de cruzarlo.
Lemesoff estaba de paso por la provincia, viajaba de Buenos Aires a Mendoza, y no quiso dejar pasar la oportunidad de regalar su arte aunque su paso haya sido fugaz y no pueda asegurar si los caminos de la vida lo traerán de nuevo a San Luis.
El arma se retroalimenta
Raúl recorre las calles de Buenos Aires principalmente regalando libros y si la gente quiere donar textos que ya estén en desuso el tanque las pasa a buscar por cualquier punto de la ciudad.