Monserrat Gómez se desliza por el agua con la categoría de sus registros. A los 18 años, y después de trece temporadas de entrenamiento, se colgó seis medallas por actuaciones individuales, de las dieciséis que sumó la delegación sanluiseña en los XVIII Juegos Binacionales que se realizaron en Mendoza.
De sus logros, San Luis rescató la mayor cantidad de preseas de su historia (en 2012 había alcanzado doce), pese a que el séptimo y penúltimo puesto de la clasificación general no escapa a la escasa actuación grupal de siempre (salvo en 2005 cuando fue anfitrión y terminó quinto).
Monserrat abrazó el oro en 50 y 100 metros pecho, y en los 100 metros espalda; fue plata en 100 metros mariposa y 200 metros combinados; y el bronce llegó en los 400 metros combinados.
Pese a que los Binacionales ya son historia, la organización-desorganizada confirmó que también hubo medalla puntana en la posta mixta 4x100. Fue de plata, aunque sin puntaje. Al equipo lo integraron Monserrat, Pía Funes, Nicolás Lucero, y Juan Ignacio Zapata.
Con el detalle, en las próximas horas “Monchi” recibiría su séptima medalla.
“Estoy muy feliz por lo que pasó en los Binacionales. Es un enorme orgullo”, le dice Monserrat a El Diario de la República, y lejos de hacer que los elogios sean unipersonales, sostiene que “todos los deportistas hicieron su aporte y cada uno entregó lo mejor”.
Buscando el máximo, le queda alguna pequeña bronca: “Tal vez pude haber sido oro en los 200 combinados (sumó plata)”.
La tos la persigue desde la finalización de los Juegos. No hubo competencia en pileta cubierta, lo hicieron a la intemperie. Y Monserrat, que entró y salió del agua diez veces en poco espacios de tiempo, sufrió las consecuencias de los cambios climáticos.
Igual, ayer a las 15 ya estuvo en El Área, para comenzar a las 16 una nueva sesión de entrenamientos.
“A todas las medallas las valoro por igual. Ahora sigo entrenando hasta diciembre, aguardando el Argentino de Primera, y luego las vacaciones”, dice Gómez, quien está en etapa de definiciones, que tendrán un efecto colateral en lo deportivo.
“Estoy viendo si me voy a estudiar educación física a Córdoba, o si sigo la carrera acá. Allá ya tengo dos piletas vistas… el consejo deportivo es que me vaya, y mis papás apoyan la decisión que tome”. Justamente fueron sus papás, Alicia y Jorge, quienes a los 5 años la mandaron a natación, con el simple afán de que “Monchi” aprendiese a nadar, ante la inauguración de una pileta en casa. ¡Y vaya si aprendió!
Monserrat es la mayor de tres hermanos (Agustín 15 años y Pilar 12); prepara las últimas materias de la secundaria en la normal “Juan Pascual Pringles”, de quien agradece el trato de directivos, profesores y compañeros que siguieron paso a paso y simplificaron su carrera deportiva; y se proyecta en el horizonte: “Quiero acomodarme bien, saber dónde ir. Después me gustaría llegar a un Sudamericano de Primera, pero en natación van dos deportistas por pruebas y las mayores tienen cinco años más que yo, que en la división superior es mucha diferencia… igual no es la urgencia, lo que quiero es acomodarme bien”, insiste.
Mientras depura la etapa de la adolescencia, Monserrat sigue en doble turno de entrenamiento. “Lo hago con ganas, me gusta. Nunca fue una carga, me gusta la exigencia. Y cuando por algún motivo no puedo entrenar, ese día es como que falta algo de mi vida”.
Con la natación incorporada a su mundo, tiene doble turno los martes y jueves, más gimnasio. Y una sola sesión los otros días de la semana. El día comienza de madrugada: de 5 a 7. Y culmina a la tarde, de 16 a 18.
En crecimiento
“Monchi” analiza la natación de San Luis: “Crece, tiene futuro, hay chicos a los cuales les va muy bien. Tengo buena relación con todos y seguramente seguirá mejorando”.
Aunque lo primero pase por ordenar su continuad educativa, y luego le acople la natación, a “Monchi” le da vuelta en la cabeza algunos registros de cara al Sudamericano de Primera: en los 200 metros combinados tiene una marca de 2.19 en pileta corta y 2.25 en larga: está a 5 segundos del record de primera. En los 200 pecho tiene 2.37 en pileta larga y 2.36 en corta: también a 5 segundos del record de las mayores. Y en los 50 metros está a 3 segundos.
En Córdoba en 2016, o en San Luis, Monserrat Gómez no detendrá su crecimiento, el personal y el deportivo.
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