El intendente de San Luis, Enrique Ponce, visitará por cuarto año consecutivo el Concejo Deliberante. Será esta mañana para dejar inaugurado un nuevo período de sesiones ordinarias.
Hasta los ediles kirchneristas se preguntan qué anuncios hará el jefe comunal, en su último discurso en el Legislativo. Es que por lo que sucedió durante la semana parece haber gastado todos los vaticinios, al menos, de los temas más urgentes para los puntanos, los empleados y hasta para su gestión.
El lunes confirmó ante la prensa el acuerdo que había cerrado con Nación para que le financie por 40 millones de pesos la construcción de un desagüe, que promete construir por avenida Presidente Perón desde Bolívar, que luego seguirá por Junín e Ituzaingó y que desembocará en el río San Luis.
En la madrugada del miércoles informó a través de una gacetilla que iba a conceder un aumento del 36% para los contratados y planta permanente, en tres cuotas.
El viernes convocó a los periodistas a un desayuno de trabajo para ratificar su intención de adelantar las elecciones municipales, aunque no precisó fechas. Y por medio del parte, dio a conocer los nuevos plazos para la entrega de las demoradas casas municipales.
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