"Silvestre" graba en la Casa de la Música de Villa Mercedes

Durante buena parte de la semana pasada, "Silvestre" estuvo en la Casa de la Música de Villa Mercedes para darle forma a su próximo disco. Luego de una gestión que comenzó en el verano, cuando el autor pasó buena parte de sus días en la provincia, el invierno lo encontró nuevamente en San Luis.

De su relación con la provincia y de su carrera musical habló el cantante con ETC en una pequeña pausa en su ajetreada agenda de grabación.

—¿Cómo viene el disco?

—Muy bien. Ya metimos varios temas y me quedo hasta terminar de grabarlo. Mi parte, la vocal, ya quedó lista y los chicos de El Ensamble seguirán pasando de los instrumento virtuales a los reales, así que estamos en plena grabación. Está quedando muy bueno gracias a Dios.

—Venías por unos días y te quedás hasta terminarlo.

—Sí, ya hablé con Roberto Sosa (N de la R: el director y guitarrista de El Ensamble Provincial que lo acompaña en la grabación) y él les dio a los músicos los arreglos para terminar cuanto antes. La intención es sacarlo antes de octubre

—¿Tiene nombre?

—No, hasta que no tengamos el material grabado y elijamos un tema de punta, no vamos a definirlo. Podría ser “Silvestre Jazz” o “Silvestre: la mujer de mi vida” pero todavía no lo sabemos. Son sólo opciones por ahora.

—¿Te animaste al jazz?

—Ya grabamos “Ana, no te enamores de mí” y pasado al jazz es una maravilla como queda. Esperemos que a la gente le guste también porque es un riesgo cambiarle al público el original. Tienen la oreja acostumbrada a escucharlo de cierta manera y por ahí no les gusta la forma en la que quedó ahora.

—Un tema que trascendió generaciones, ¿necesita una renovación?

—Totalmente, y el arreglo que le hicieron los chicos tiene una onda espectacular. Hay otro mío de los 70, “Aprendimos”, o “Manuela va juntando flores y sueños de algodón” que tienen unos arreglos de jazz mezclados con bossa nova y tienen una onda espectacular. Estoy muy contento con lo que estamos haciendo. Le estoy dando una vuelta de tuerca a mis temas clásicos y además vamos incorporando otros clásicos, como “Extraños en la noche”, que es un tema increíble, y “Chica de Ipanema”. Dentro del disco va a haber 3 o 4 temas internacionales muy conocidos.

—A esas composiciones ¿cómo las ves en esta versión?

—Como músico estoy sorprendido. A veces uno piensa que las canciones nacen y mueren de una manera y es que no: la diversidad musical hace que puedas plantearlo de distintas formas. Hay dos o tres temas que me dejaron totalmente sorprendido por cómo suenan y por lo bien que quedan en el estilo del jazz. Estoy conforme, satisfecho y con la ansiedad que a la gente le guste este material. Ojalá que no me equivoque en esa percepción.

—Hablando de renovación, ¿escuchaste a alguien tocando temas tuyos?

—Escuché algunos pero no tenían muchos cambios. Tomaron el tema y lo grabaron con arreglos similares. Sólo una vez me llevé una sorpresa en Puerto Rico cuando iba del aeropuerto al hotel y en el auto escuché un rock and roll furioso y mi manager me dijo que era un tema mío, "Eres mía niña mía". Estaba muy buena esa versión. Pero en general a mis temas los graban casi igual. Al comienzo de mi carrera Bárbara y Dick grabaron “Déjame escuchar”, que fue mi primer tema, pero muy parecido a mi versión.

—Pero vos no estás tan lejos del rock. Tus comienzos fueron en ese género.

—Totalmente, sí, por eso me gusta el jazz también.

—Las baladas, que llegaban a un público más amplio, ¿tuvieron que ver con tu etapa de actor?

—Y sí, aunque de todas maneras nunca renuncié al rock. En todos mis discos vas a encontrar metidito algún rock, un blues o un tema medio “protestoso”. Es una esencia de la que no me pude despegar nunca.

—¿Cómo ves a los músicos de El Ensamble?

—Estoy feliz porque los chicos de El Ensamble se tocan la vida, es uno mejor que el otro. Cada vez que llego al estudio y escucho los arreglos me quedo sorprendido.

—¿Habrá invitados en algún instrumento o un tema a dúo?

—Todavía no apareció nadie pero lo tengo pensado, como falta la mitad el disco todavía, podría ser. Habría que elegir el tema y artista. Tengo que hablarlo con Robertito Sosa para ver si me recomienda algún músico, tenemos que intercambiar ideas. Me gustaría cantar un dúo, tal vez con algún referente del jazz en Argentina, que son pocos. Tengo uno pensado pero no voy a decir quién es. Si se da, por ahí damos una sorpresita.

—¿Tu apodo tiene que ver con los dibujitos animados?

—Siempre me gustaron los dibujitos y el día que me llamaron de la compañía me pidieron que cambie el nombre. Yo quería llamarme como soy, José Luis Rodríguez, pero a mi productor no le gustaba, me decía que no iba a triunfar con ese nombre porque no iba a pegar nunca. Me llamó el jefe de arte con el disco listo para imprimir y me dijo que necesitaba un nombre, mientras hablaba por teléfono con él, aparecieron en mi televisor esos dibujitos y le dije que quería llamarme 'Silvestre'. Y parece que gustó y aquí estamos, después de tantos años.

—¿O te ganó de mano “El Puma”?

—No, él empezó después, su llegada al país se dio a fines de los 70.

—Era un visionario ese productor

—Total, era un visionario total.