La Municipalidad de San Luis cuenta con un problema al que no le encuentra solución, por ahora. En sus operativos secuestraron 530 motos por distintas faltas pero sus dueños jamás fueron a retirarlos, por los que permanecen haciendo “bulto” en el depósito de calle Pringles.
El director de Tránsito, Leandro Lucero, reconoció que tienen muchos rodados secuestrados que no fueron retirados por sus dueños porque dejaron pasar el tiempo y cuando fueron a abonar se les hizo imposible la carga. "Como los negocios te entregan los vehículos en cuotas, era más fácil sacar uno nuevo. Además muchas motos están sin patentar porque las firmas te las entregan con una boleta simple de compra y venta", dijo.
La solución, según explicaron, tiene dos opciones. Por un lado, el Juzgado de Faltas es quien debería decidir la suerte de esos vehículos a los que nunca se le pagaron la multa. La otra, es que el Concejo Deliberante de la ciudad sancione una ordenanza con ese fin. Mientras, los funcionarios municipales están atados para elegir la suerte de esas motos.
Durante el fin de semana la Dirección de Tránsito realizó dos operativos. El viernes fue en el microcentro, donde revisaron 80 vehículos y retuvieron un auto por falta de documentación y porque al conductor le dio positivo el test de alcoholemia. Sin embargo, un compañero, que era el conductor designado, tuvo un resultado negativo y continuó con la marcha del coche. En total fueron 25 actas.
Mientras que el sábado el control fue realizado en al menos tres puntos de la ciudad: Ituzaingó y Bolivar, Illia y Lafinur, Rivadavia y San Martín. Fueron requisados 86 vehículos y dos retenidos: un ciclomotor por falta de documentación y porque tenía el escape libre. Además un auto por no tener los papeles. No hubo borrachos al volante.
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