No fueron uno, dos o tres, sino cuatro los maxikioscos de una misma cadena clausurados por la venta de alcohol fuera del horario permitido por las reglamentaciones locales. Según los inspectores municipales, en cada uno de ellos se violaron las fajas y volvieron a abrir las puertas.
Durante el fin de semana extra largo varios locales de una cadena local de maxiquioscos o polirrubros que no interrumpen su horario de atención, identificados como “el 24 de las 25”, fueron detectados infringiendo la ordenanza 1202 que prohíbe la comercialización de bebidas alcohólicas entre la medianoche y las ocho de la mañana. Pero además, violaron las fajas de clausura de oficio.
“En todos estos casos fuimos advertidos por llamados de vecinos al teléfono 147 (Sistema Único de Reclamos) y pudimos constatar que vendían por lo general vino o cerveza en el horario prohibido. Apoyados por la policía, nuestros inspectores colocaron las fajas y labramos el acta de infracción. Más tarde pudimos comprobar que habían quitado esas fajas, las repusimos y otra vez volvieron a violentarlas y continuaron con la atención”, manifestó Silvia Acosta, jefa del Programa Unidad de Control e Inspecciones Municipales (Ucim).
Los locales que incumplieron las normativas locales se encuentran ubicados en Pedernera e Hilario Cuadros, Pringles y Leonismo Argentino, San Luis y avenida Perón, y avenida Mitre 1594. Las actas donde los inspectores escribieron todas las irregularidades detectadas fueron enviadas ayer al Juzgado de Faltas, quien deberá resolver la situación de cada uno de ellos.
“Además de la infracción por violar el horario de venta de alcohol, dentro del Código Municipal de Faltas está prevista otra infracción por la rotura de la faja de clausura. Esos comercios debían esperar a que nuestro juzgado resuelva sobre las actas y la situación de cada uno de ellos, eso es lo correcto”, indicó Mónica Fernández, responsable del Juzgado de Faltas.
La jueza confirmó ayer que algunos comerciantes ya habían realizado su descargo sobre esta situación y ahora deberá resolver qué tipo de sanción aplicará según lo estipulado en los casos de venta de alcohol.
Un diez en multas
Hay un local que es casi un clásico de las clausuras de los inspectores locales. Está ubicado en una zona caliente, frente a plaza San Martín, y fue clausurado por décima vez en la madrugada del martes. Aunque a diferencia de los anteriores, sí acató la orden.
“Beverage” es un polirrubro ubicado en Curupaytí 15, y al que nuevamente le colocaron la faja por comercializar bebidas a las cuatro de la mañana. “Sobre ese comercio puntual, el año pasado dicté la clausura definitiva por la reiteración de las faltas, pero esa decisión fue apelada por el propietario y ahora debe resolver el ejecutivo municipal”, dijo la jueza de Faltas.
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