Un puntano que engalana Corea a puro tango argentino
Ahora está en Asia pero de la mano del baile recorre el mundo junto a su esposa e hija.
La ventana es enorme. Internet permite ver cómo el puntano, Gabriel Ponce, y su mujer, Analía Morales, hacen de la pista de baile una nube, de los movimientos un dibujo etéreo y del tango una danza que exuda pasión.
Las nuevas conexiones también permiten armar un puente. Desde Corea del Sur, el puntano responde por WhatsApp, entre otras cosas, qué hace en esa parte del mundo y cómo es que salió de San Luis en busca de un sueño que se volvió milonguero.
Las primeras palabras que envía desde unos 20 mil kilómetros, desde Seúl, son: “Soy Gabriel Ponce, soy de San Luis, era bailarín del ballet folclórico nacional, ahora con mi mujer y mi hija viajamos y tratamos de difundir el tango en el mundo, en estos momentos estamos en Corea”. Una síntesis que luego desglosa, tamiza con datos, anécdotas y algunos colores.
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