Un proyecto "reactivo" que permitió ubicar a cada uno en su lugar

Parecía que sería una sesión intrascendente. Pero se convirtió en una de esas reuniones legislativas que terminaron siendo “reactivas” ya que, ante la propuesta de un tema vinculado al bien común y al progreso de San Luis, permitió separar aguas y ver de qué lado se paró cada legislador. El disparador fue un proyecto de resolución que postulaba crear una comisión de diputados para que, junto con la CGT, senadores y diputados nacionales, solicitaran una audiencia al presidente Macri para pedir por la extensión de los beneficios de la promoción industrial, mediante la prórroga o extensión del vapuleado decreto 699. 

Es cierto que la posibilidad de un mano a mano con el Presidente resulta lejana. Pero el reclamo parece más que justificado si se tiene en cuenta que desde que asumió la Presidencia Mauricio Macri, unos 700 jefes de familia quedaron en la calle debido al cierre de fábricas e industrias en San Luis en diferentes puntos de la provincia. 

Los impulsores de la idea eran los legisladores del interbloque Compromiso Federal. Y en principio legisladores de Cambiemos habían anticipado que podrían acompañar la iniciativa aunque no veían la necesidad de que fuera “urgente”, a pesar de las pérdidas de trabajo sufridas. 

Con los argumentos referidos a que la iniciativa estaba “vacía de contenidos” o que no hacía falta formar una comisión, los diputados (11 en total) alineados con el macrismo terminaron votando en contra del proyecto, que, de todos modos, fue aprobado con 20 votos a favor.

Hubo sorpresa, estupor y algo de bronca también entre quienes aprobaron la iniciativa respecto de la actitud asumida por sus colegas que se negaron a aprobar la resolución.  Por la tarde las redes sociales se encargaron de “mandar al frente”  a los legisladores que se opusieron al proyecto: Bartolo Abdala, Ariel Barrozo, Ingrid Blumencweig, Alejandro Cacace, José Fara, Ricardo Giménez, Raúl Laborda, Fidel Haddad, Gabriel Muñoz, Walter Oio y Norma Pastor.