En 2 años ya colocaron más de 800 anticonceptivos bajo la piel

Lanzado en el país, como “la novedad” de los anticonceptivos, los implantes subdérmicos para evitar embarazos, comenzaron a colocarse en San Luis en mayo de 2015. Si bien no muchas personas han oído hablar de la opción, en los hospitales y centros de salud de toda la provincia ya colocaron más de 800 en dos años. El objetivo de este método (una vez aplicado en el brazo dura tres años) es prevenir el embarazo en mujeres de 14 a 24 años.  Con este plan, que depende de Nación, los organismos de salud intentan promover el cuidado y la planificación familiar.

“Un implante subdérmico es una varillita plástica que se coloca en la parte interna del brazo, más cercano al codo, que contiene una hormona que sirve como un método anticonceptivo, con una duración de tres años. La ubicación es muy fácil. Ponemos  anestesia local y metemos una aguja que contiene el implante. Es muy pequeño, del tamaño de un fósforo, lo que permite que la paciente tenga una forma fácil de controlar, porque lo toca  sobre la piel”, explicó la jefa del Programa de Salud Sexual y Reproductiva, Yolanda Bertazzo.

El procedimiento fue incluido en un programa del Ministerio de Salud de la Nación en 2014, para prevenir la repitencia de  embarazos con modalidades de larga duración. Un nuevo tipo de  planificación familiar, que en Francia, país en el que hacía furor, ya tenía más de una década. En ese año la cartera nacional adquirió un total de 10 mil unidades (los fabrican en el extranjero), de las cuales entregó 8 mil a 10 provincias del país. A  San Luis llegaron 1.600 “varillitas” en marzo de 2015, pero los médicos los comenzaron a aplicar en mayo,  luego de pasar por una serie de capacitaciones. Bertazzo dijo que en la provincia hay 815 casos registrados de implantes, aunque calcula que hay más de 1.000, porque no todos los médicos enviaron al programa una planilla donde dejan asentados los procedimientos.

“Está enfocado a la adolescencia. Es decir a mujeres o niñas que van de los 14 años, a adultas jóvenes hasta los 24 años, hayan tenido, o no, un evento obstétrico. Me refiero a que es decir hayan tenido un aborto, un parto, dos partos o ninguno.  La idea es tratar de captar a las adolescentes y posponer la maternidad, hasta llegar a una edad  a la que consideran adecuada para empezar a tener niños”, contó la jefa del programa. El implante dura tres años, tiempo en el que  libera una hormona que evita la ovulación.

Como cualquier opción para prevenir embarazos, las mujeres pueden obtenerlo en cualquier centro que los tenga. Es gratuito y esencialmente cubren las necesidades de las que no poseen obra social.  Ante la pregunta de si es seguro o tiene margen de riesgo, la doctora respondió: “No hay tanto porcentaje, salvo los primeros 15 días, que como cualquier método anticonceptivo, hay que decirles que utilicen una segunda opción, como el preservativo”.