Una "brigada" de jóvenes lleva la solidaridad como estandarte

La sonrisa y el abrazo que llega después de un trabajo bien hecho, es la fuerza que motiva a los mercedinos que desde hace algunos meses se dedican a colaborar con los vecinos más humildes de la ciudad. La "Brigada Solidaria”, como nombraron al grupo que nuclea a los jóvenes voluntarios, tiene como objetivo ayudar a las familias de la periferia que viven alguna necesidad edilicia. Puntualmente se dedican a reparar techos que por lo general están hechos con materiales precarios. Ya lograron refaccionar cien cubiertas y van por más.  

Para celebrar esa gran meta, los brigadistas tuvieron un agasajo en el Sindicato de la Carne donde cada uno de ellos recibió una mención por su compromiso. Más de dos mil personas los acompañaron y los felicitaron. También participaron los beneficiarios que mejoraron su vivienda con la ayuda de los jóvenes. Durante unas horas, hubo comida y música en vivo para todas las familias que se acercaron a vivir una tarde emocionante. 

El vicegobernador Carlos Ponce, quien está al frente de la brigada, destacó la labor de los mercedinos y aseveró que el grupo nació con el fin de levantar la bandera de la solidaridad y el compromiso social. 

"La premisa de la brigada es seguir con lo que nos encomendó el Gobernador. A nivel nacional hay una alerta con respecto a las medidas económicas que se han tomado y que han dejado un impacto fuerte en los lugares más vulnerables: la caída del empleo, los tarifazos, la inflación. Entendemos que debemos trabajar desde la periferia al centro, comprendiendo las necesidades que atraviesan muchos de nuestros ciudadanos a raíz de estas medidas", dijo. 

Además de reparar cubiertas, reemplazar lonas, cartones y bolsas por chapas y materiales, los hombres y mujeres, se animan a construir contrapisos, refaccionar conexiones eléctricas, limpiar sitios baldíos y hace algunos unos días comenzaron a trabajar en un perchero comunitario. 

El vicegoberandor señaló que la brigada recibe colaboración del Gobierno para adquirir los materiales, pero a su vez recalcó que es necesario que “todos los sectores se involucren. Esta no es tarea sólo del Estado”. 

También encomendó a los comerciantes y empresarios “que se sumen a esta cruzada. Principalmente las empresas que por ahí, por una cuestión de negocios, han tenido que rotar gente y dejarla afuera y esas personas por ahí quedan excluidas”. 

Algunas de las organizaciones sindicales de la ciudad ya sumaron su granito de arena y colaboraron aportando materiales para la construcción de las cubiertas. 

“Que los jóvenes nos acompañen en esta cruzada solidaria, nos parece más que importante porque es una buena manera de poner en práctica los valores. De esta manera el camino que van haciendo los aleja de la calle y de lo malo, los pone en el camino del compromiso social, los sensibiliza para que sean personas de bien. En definitiva, este trabajo no sólo hace bien a quienes necesitan una mano, sino también a quienes lo hacemos”, reflexionó Ponce.