Dictarán una maestría en lechería bovina

A comienzos de mayo, la Universidad Católica de Cuyo (UCCuyo) y el Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción firmaron un convenio con la finalidad de fortalecer los vínculos entre el conocimiento y los productores. Por ese motivo a partir del 10 de julio comenzará, en la sede de la casa de estudios en San Luis, la Diplomatura Superior en Lechería Bovina que durará 6 meses y que en principio se dictará por única vez.  La modalidad será completamente a distancia.

Las inscripciones ya están abiertas pero aún no se conoce la cantidad de matriculados. El decano de la Facultad de Veterinaria de la UCCuyo, José Lamalfa, informó que hasta el momento han recibido consultas de países limítrofes, entre ellos Chile y Colombia, para capacitarse.

"Dentro del convenio de colaboración mutua que firmamos con el ministerio provincial, hay un punto específico que habla de crear un espacio en la academia para dar contenidos de producción tambera. El objetivo de la diplomatura es colaborar con la reactivación lechera, en la que la provincia está muy interesada", explicó el decano, que destacó que en el armado del posgrado se buscaron a los mejores veterinarios y profesionales afines al sector.

"El curso tendrá una duración de seis meses, por lo que en diciembre terminaría con una actividad práctica que será optativa según el lugar de residencia del alumno. Tendrá un costo de dos mil pesos mensuales y además deberán pagar una matrícula del mismo monto".

Las prácticas quieren encuadrarlas en nuevos convenios que ya estarían cerrados. "La Serenísima, que está instalada en Villa Mercedes, estaría interesada en que fuéramos beneficiarios de un sistemas de becas para completar la formación de los alumnos. La medida es muy beneficiosa para nosotros como academia", adelantó el veterinario.  

"El ministerio tiene planes de fomento para los productores y contacto directo con las grandes empresas que están radicadas en la provincia. Hay cosas que no se saben de la producción en los tambos, así que nuestro aporte será desde lo académico. De esa manera nos ocupamos de la capacitación del recurso humano, vital para cualquier actividad", completó.

Como está dirigido a profesionales que ya tienen conocimiento en animales, el curso tiene puntos claves para desarrollar en su programa. "Trataremos temas vinculados a la sanidad de las vacas, que generalmente trae graves problemas productivos. Además de conocer las normas de higiene para el manejo de la leche fluida una vez que fue extraída. Otro de los temas de conflicto para el sector es la comercialización. Por eso  nos parece importante que conozcan los mercados con los que cuenta la materia prima", dijo el rector, y agregó que solo se hablará de leche líquida y que más adelante podrían tratarse los derivados lácteos.

"Hay un nuevo tambo que se instaló en las cercanías de La Angelina, en el Departamento Dupuy. Los dueños, que son cinco, llegaron desde Buenos Aires por la crisis que padece esa zona, con grandes inundaciones y problemas con la sanidad de las vacas. Ellos tienen formación y experiencia en el tema lechero, porque vienen de familias relacionadas con el tambo de toda la vida. Sin embargo es posible intercambiar información a partir de los datos que podemos aportarles de la zona, que en principio es más ganadera", dijo Lamalfa.

"La facultad quiere acompañar el proceso de creación de un polo lechero sanluiseño. Por eso la capacitación, en principio, está pensada para ser dictada por única vez. Si llegásemos a ver que la demanda es mucha, tendremos que pensar en la posibilidad de crear nuevos espacios similares ", informó, y agregó que en el caso de repetirse pasaría a ser una especialización que quedaría dentro de la currícula de la facultad .

El acuerdo

Cuando se reunieron el ministerio y la universidad, coincidieron en la necesidad de capacitar al sector productivo y generar acuerdos que ayuden a mejorar la calidad de vida. De la reunión, según expresa la Agencia de Noticias de San Luis (ANSL)el 24 de mayo de este año, participaron el ministro de Medio Ambiente, Campo y Producción, Sergio Freixes, y el decano de la Facultad de Veterinaria, José Lamalfa.

En aquella oportunidad, Lamalfa explicó desde su experiencia que cualquier tarea de fomento al productor que esté acompañada por la formación del recurso humano se vuelve más eficiente. Los temas centrales que trataron fueron la producción de alfalfa, la porcina y la idea del gobierno provincial de formar un polo lechero. Eso los llevó a realizar actividades que hoy se concretan en el espacio que la academia creó para los que quieran especializarse en lechería bovina.

Freixes, en una acertada decisión, consideró que los vínculos con la universidad pueden darles herramientas no solo a los trabajadores del campo, sino también al sector industrial, para que sus tareas deriven en resultados positivos que finalmente redunden en beneficios para todos los sanluiseños. Además, consideró la posibilidad de crear nuevos convenios para acompañar la sociedad.

A comienzos de este mes, en Villa Mercedes, donde desde el año 2000 está radicada la conocida marca de lácteos La Serenísima, se realizó una capacitación de la que participaron productores técnicos y estudiantes. La revista El Campo lo reflejó en su edición del 10 de junio, bajo el título: “Sigue la cruzada por un polo lechero en San Luis”. Allí explica que el encuentro perseguía un doble propósito y era el de brindar estrategias para aumentar los volúmenes productivos del fluido y además permitir que nuevos tambos se radiquen en la provincia. 

Fernando Storni, director general de Mastellone, aseguró a este medio que no era la primera vez que abrían las puertas de la empresa. Que por lo menos habían tenido 40 encuentros entre capacitaciones en ordeñe y cría, jornadas a campo, concurso de guacheras, entre otros encuentros, siempre con la finalidad de mejorar las condiciones de los tan castigados tamberos.

Finalmente, las palabras no quedan en promesas rotas que nunca llegan a concretarse, sino que a paso firme productores, organismos públicos y los distintos actores del sector agropecuario trabajan para hacer la “revolución productiva” en la provincia.