A los buzos, policías y bomberos voluntarios se sumaron perros entrenados. El operativo comenzó a las 5 y las condiciones climáticas son buenas. El joven tenía 23 años y vivía en Cortaderas.
Este martes desde las 5 de la madrugada se reinició la búsqueda del cuerpo del joven ahogado en el dique San Felipe.
Buzos de la Policía de San Luis y Bomberos Voluntarios de Tilisarao, Naschel y Renca, junto a personal de San Luis Agua y embarcaciones particulares, buscan los restos del muchacho de 23 años que desapareció el domingo pasado.
Según fuentes policiales, el chico era oriundo de Catamarca pero estaba radicado junto a su familia en Cortaderas.
Según los bomberos, en la zona que el joven se lanzó al agua, el dique tiene una profundidad de entre 8 a 10 metros. Desde el inicio de la búsqueda los buzos realizan inmersiones de 30 minutos cada una, sin resultados por ahora.
La tarea también está orientada en las costas del dique, con policías de la comisaría 23ª y efectivos y perros de la división Canes de la Unidad Regional III. El lunes, las ráfagas de viento complicaron el trabajo de los rescatistas pero este martes el clima y la visibilidad son inmejorables.
De la alegría al drama
Este domingo el joven junto a cuatro amigos ingresaron al dique cerca de las 14:30, luego de almorzar. Iban en una balsa cuando, en un descuido, uno de los remos cayó al agua. El muchacho se tiró para alcanzarlo pero, según el relato de sus acompañantes, habría sufrido un calambre y se hundió. Desesperados trataron de rescatarlo, pero ya no salió a la superficie.
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