“No hay que demonizar las herramientas tecnológicas”

Incorporar las herramientas digitales para conseguir un objetivo puede ser de gran ayuda, especialmente en el ámbito de la salud. Así lo aseguran dos especialistas villamercedinos que fueron consultados por El Diario de la República.

Diego Pereyra, médico y coordinador de la Clínica de la Obesidad en Villa Mercedes, opinó que en el ámbito de la nutrición el uso de las aplicaciones es más que común. “Una propuesta bien desarrollada para un objetivo específico puede ser muy buena, y actualmente en el mercado hay muchas de esas opciones. En este campo notamos que suelen ser muy provechosas, y apuntan a mejorar la calidad de la alimentación”, dijo.

A su vez comentó que, específicamente en obesidad, hasta ayudan a mantener la adherencia a los tratamientos de sus pacientes. “En el caso de las enfermedades crónicas, es decir que no tienen cura, es difícil para las personas tener que seguir una constancia en los cuidados durante toda su vida. Al ser así, tenemos que desarrollar una herramienta conductual de contención y mantención a la indicación clínica. Y porqué no aplicar tecnología con una visión de acompañamiento avaladas o de común acuerdo con el paciente. Creo que es bueno”, señaló.

También resaltó que las aplicaciones permiten que la persona no se sienta juzgada a la hora de elegir qué método o actividad realizar para mejorar un aspecto de su vida. “Puntualmente en obesidad, pasa que la persona busca que no se lo califique o se haga juicio de su estado, y eso, lamentablemente pasa mucho. Es un gran error que cometemos en medicina; quizás es hora de comenzar a brindar más apoyo”, reflexionó.

De todas maneras, Pereyra alertó que a pesar de los beneficios “no hay que creer que con estas herramientas vamos a reemplazar al médico o la visita al consultorio. Si consideramos que además va a aportar a un tratamiento curativo de algo, o será la solución de todos los problemas, estamos equivocados”.

Por su parte, Karen Carrión, psicóloga especialista en el área sociocomunitaria y en el ámbito de consumo problemático, coincidió con el médico: “Creo que las aplicaciones son súper útiles en muchas situaciones, pero es importante saber si estas generan alguna dependencia o que incorporés hábitos. Y que dependás de la aplicación para tener un estilo de vida, es lo más riesgoso y puede hablar de lo más patológico”.

Asimismo indicó que hay que tener recaudos a la hora de incorporar las propuestas que ofrecen los programas móviles. “Me parece que estamos en una era ‘verde’, en la que está de moda todo lo eco, lo bio, lo fitness y eso puede ser riesgoso de acuerdo al grado de dependencia que tengas, ya que puede hablarse de conductas adictas, de acuerdo a la personalidad de cada usuario”, comentó. Y añadió: “Lo ideal es que puedas adquirir las costumbres, pero que no siempre tengas que vivir a cuentas de la aplicación. Si lo hacés para tener una mejor vida, bien. Pero si es para tratar de pertenecer a una comunidad, porque el otro te está viendo si sos mejor persona o no, creo que podría ser problemático”.