Sequías e incendios le pegaron duro al campo

Más de un 60% de los empresarios agrícolas nucleados en la asociación civil CREA experimentó en 2020 daños productivos por sequía en sus cultivos de invierno, mientras que otro 38% registró perjuicios a causa de heladas intensas. En ambos casos se trata de fenómenos climáticos que vinieron a sumar incertidumbre a un 2020 plagado de inconvenientes debido a la pandemia de COVID-19 y los eternos problemas económicos que afronta la Argentina, que lleva a los gobiernos a intentar buscar recursos de donde sea, y el campo es una de las "víctimas" más buscadas.

Esos números surgen de la última encuesta SEA CREA realizada durante el  mes de noviembre, en base a una muestra representativa de 1.317 empresarios consultados, todos socios de la entidad que nuclea a más de 2.000 firmas dedicadas a la actividad agropecuaria.

 Debido a las adversidades climáticas, los rendimientos logrados o proyectados de trigo y cebada en el norte argentino, el norte de la región pampeana y la zona semiárida (en la que se encuentra encuadrada San Luis, con todas sus limitaciones en materia de suelos, agua y clima) fueron o serán sustancialmente inferiores a los planificados inicialmente. La excepción se dio en el sur de la zona pampeana, donde se prevé una cosecha acorde a la esperada debido a que las lluvias acompañaron como no lo hicieron en otras regiones.

Hay pesimismo, en general, entre los productores. El 55% estima que las condiciones económicas van a empeorar de acá a un año.

 Por otra parte, un 10% de las empresas CREA resultaron afectadas en el último año por incendios, que arrasaron con miles de hectáreas y acabaron con muchos rodeos. Los mayores incidentes ocurrieron en las regiones del NOA, NEA, el Chaco santiagueño, el norte de Santa Fe y casi la totalidad de la provincia de Córdoba, pero sobre todo su región norte.

 Un 40% de los empresarios que registraron incendios reportaron daños en campos naturales, mientras que un 28% aseguró que el fuego perjudicó cultivos o pasturas, un 11% que afectó a componentes de la infraestructura del establecimiento y un 7% a bolsones con granos, o sea la comida para los animales o las reservas económicas que había dejado la cosecha anterior.

En cuanto a las empresas ganaderas, además de resultar afectadas por restricciones hídricas en la mayor parte del territorio, también fueron perjudicadas por anegamientos –provocados por temporales intensos– en sectores del sur de la región pampeana.

 Frente a tales eventos, más de la mitad de los empresarios pecuarios procedieron a realizar destetes anticipados, mientras que en muchas situaciones fue necesario suplementar a rodeos de cría con recursos adicionales a causa del recorte de la oferta de forraje provocado por golpes climáticos. Esto implica más recursos económicos y poco margen de negociación para vender los terneros.

 En las regiones CREA del NOA, Córdoba norte, Chaco santiagueño, Litoral norte y Sur, norte y centro de Santa Fe la mayor parte de los productores consultados informaron que, debido a la sequía, la condición del rodeo al momento del servicio era de regular a mala.

En lo que respecta a las empresas lecheras CREA, un 55% de los tamberos consultados afirmó haber registrado inconvenientes productivos por sequía en el último cuatrimestre, que afectaron la siembra prevista de cultivos de verano y la productividad del rodeo lechero. El tambo es, desde hace años, una de las actividades más castigadas del campo argentino debido a los bajos precios que reciben en tranquera y los inconvenientes con el clima.

Expectativas

Un 72% de los consultados dijo que considera que la situación económica del país se encuentra peor hoy respecto de un año atrás, mientras que un 55% estima que las condiciones macroeconómicas podrían empeorar dentro de un año.

En lo que respecta a la evaluación de la situación económica y financiera de la propia empresa, un 35% de los encuestados aseguró que se encuentra mejor que un año atrás, mientras que un 41% dijo estar igual y un 24% peor. En cuanto a las expectativas para dentro de un año, un 45% consideró que estará igual, un 36% peor y un 19% mejor.

 El cultivo que en el ciclo 2020/21 tendrá mayor crecimiento en la rotación agrícola será el girasol (+49% respecto de la intención de siembra relevada un año atrás), seguido por el maíz tardío (+16%), al tiempo que el área de maíz temprano decrecerá un 17% y la superficie de soja un 5%. Tales cambios pueden responder en parte a las condiciones climáticas, tanto presentes como previstas. De todas maneras, el maíz –en todas sus variantes– sigue ocupando casi un tercio del área de siembra proyectada.

 Los planes de retención en los rodeos de cría bovina son muy variables según la situación ambiental y financiera presente en las distintas empresas de las diferentes regiones pecuarias CREA. Sin embargo, es evidente que, en términos promedio, la magnitud de las intenciones de retenciones de vientres viene decreciendo en el último lustro.

 Los empresarios tamberos consultados proyectan una variación promedio de la producción de leche del 4,1% para los próximos cuatro meses –nivel superior al esperado en el bienio anterior–, mientras que para el próximo año la expectativa es de un aumento medio del 5,3%, tanto por incremento de vacas en ordeñe como de aumentos en la producción individual del rodeo.