Realizan una colecta para que 57 niños puedan tener sus mochilas

La Fundación "Sí" realiza una colecta para ayudar a 57 niños a tener un comienzo de clases con todos los útiles necesarios. Cada persona que se sume, apadrinará y le armará su mochila a un chico de los comedores “Pirucha” o “La Nona”. La iniciativa comenzó hace una semana y se extenderá hasta el 4 de marzo inclusive.

Actualmente es la campaña más intensa que tiene la institución. “Consiste en que cada colaborador se comunique por nuestra página en las redes y pueda preparar una mochilita para el niño que se le va asignar. Tenemos distintas opciones de acuerdo al grado de escolaridad”, contó la voluntaria Cintia Casseignau.

La colecta tiene cuatro categorías en las que pueden colaborar y que se dividen en: Jardín, 1°, 2° y 3° grado de primaria, 4°, 5° y 6° grado de primaria y secundaria. “Son 57 las mochilas que vamos a juntar como número base. Ya contamos con 15, y esperamos que sean muchas más, para poder ayudar a otros comedores y merenderos que lo necesiten”, dijo.

El gesto solidario también puede ser compartido y entre varios donar un set, que puede sacarle una sonrisa o incluso cambiarle la vida a un alumno. Las instituciones beneficiadas están ubicadas en los barrios Villa Rafaela y Las Mirandas.

Son alrededor de 25 los voluntarios de todas las edades, que llevan a cabo actividades en la fundación. Las puertas siempre están abiertas para sumar colaboradores que estén dispuestos a ayudar de manera desinteresada y desde el corazón, y que puedan aportar nuevas ideas y miradas solidarias. 

La ONG tiene como principal objetivo promover la inclusión de los sectores más vulnerables de la Argentina, y en este caso de nuestra ciudad. El referente nacional es Manuel Lozano y en el caso de Villa Mercedes, Valentín Díaz. “Hace tres años que trajimos la sede. Empezamos a trabajar con algunos de los proyectos que tiene la fundación en el país, que por supuesto se reflejan en todas las sedes del interior y dependiendo de las condiciones de cada provincia”, contó Nicolás, quien es colaborador y hermano del referente local.

Durante el año realizan talleres que forman parte del programa “Sí pueden”, que no tienen que ver tanto con disciplinas escolares, sino que apuntan a fomentar los valores, las emociones de los niños, aprender a diferenciar la violencia, promover el compañerismo y cuidar el medio ambiente. Los sábados, acompañados de una merienda, los talleristas tratan de transmitir valores como el amor a los animales; reglas de convivencia que les sirvan para el colegio; el manejo y la expresión de las emociones, y la manera de actuar, promoviendo la paz y alejándolos de la violencia.

“Estamos trabajando para poder llevar a cabo nuevos proyectos como residencias universitarias, ya que la ciudad vive una gran demanda de estudiantes que buscan su lugar todos los días y vemos que no todos pueden pagar un alquiler”, anticipó Nicolás.

También es un espacio de contención donde los niños se sienten acompañados y queridos por cada voluntario. "Ellos ya saben que nosotros esperamos con ansias que lleguen los sábados para verlos y compartir", expresó Cintia.