Una parada de colectivo barrial se volvió un tributo a Maradona

A casi dos meses de su fallecimiento, la figura de Diego Armando Maradona todavía despierta pasiones en todos los rincones del mundo. Y en Villa Mercedes, en pleno corazón del barrio Santa Rita, el ídolo se ganó otro homenaje a pedido de los vecinos que querían recordarlo y tenerlo cerca en sus actividades cotidianas. Por eso, la parada de colectivo más usada de la zona fue bautizada con el nombre del "10" y se convirtió en la primera de la ciudad en tener una denominación.

El refugio está ubicado sobre la calle Buenos Aires, entre Guayaquil y Chile, a pocos metros del conocido playón del complejo habitacional de monoblocks. Entre esas paredes, muchos habitantes esperan a diario la línea Este para ir a sus trabajos o al centro a hacer sus trámites y compras.

"Fue una iniciativa de ellos, que nos pidieron autorización para hacer un homenaje. Nos pareció una muy buena idea y nos pusimos de acuerdo para hacer esta intervención artística", contó Germán Sepúlveda, quien está a cargo del Programa Ente Regulador de Transporte Regular, No Regular e Inclusivo del Municipio.

La Comuna aportó los materiales y el artista plástico Pablo Olmedo ilustró el rostro del exjugador y técnico sobre los colores de la Bandera Argentina y con su firma característica. Al lado, estampó una frase que, según Sepúlveda, representa lo que muchos sienten por Maradona: "Que me importa lo que hizo con su vida (sic), me importa lo que hizo con la mía".

El mural fue hecho por el artista plástico Pablo Olmedo en la parada más concurrida de la zona.

 

"Se trata de ensalzar los valores positivos que genera Diego en los argentinos, como la unión y la defensa de los más vulnerables", sostuvo.

Además de ser la primera en tener nombre propio, la garita es una de las pocas que quedan en Villa Mercedes que están construidas con material, a diferencia de las más nuevas que están hechas con caños y chapas.

Por eso, Sepúlveda señaló que ven con buenos ojos que se transformen en espacios para el arte callejero que representan los valores de la comunidad. "Históricamente estos lugares han sido vandalizados y rayados, por eso creemos que de esta forma los van a cuidar más. Los vecinos estaban muy contentos porque es una figura popular que representa mucho al barrio", dijo.

Protocolos en las paradas

Además del arte, los refugios para esperar el transporte urbano se han vuelto un punto clave para extremar cuidados contra el avance del coronavirus.

Por ello, el Municipio realiza desinfecciones con agua y cloro en las diferentes garitas. Pero también instalaron tótems con alcohol en gel en las más concurridas, para que los pasajeros puedan higienizar sus manos antes de subir al colectivo. "Por el momento tenemos en las paradas principales de avenida Mitre, la calle Balcarce y la terminal de ómnibus", detalló el funcionario.