La Feria le devolvió la ilusión a los productores locales

La alegría de trabajar y de poder contar con un espacio para vender lo producido fue evidente en la actitud y en la sonrisa de más de cien productores que participaron en la primera edición 2021 de la Feria de Pequeños y Medianos Productores, que se desarrolló durante el fin de semana pasado en el Parque de las Naciones.

En San Luis capital, miles de personas se acercaron al predio para disfrutar del paseo que les permite conocer lo que se hace en el ámbito rural: dulces, conservas, quesos, chacinados, miel, cerveza artesanal, panificados, producción de huevos de codorniz y de gallina, todo con sello local, de gran calidad y a buen precio.

Hubo mucha gente, pero la organización estuvo a la altura de las circunstancias. No se podía ingresar al parque sin tapabocas, los espacios comunes se sanitizaban, se respetaba la distancia de dos metros y por momentos cortaban el ingreso unos minutos para que hubiera recambio de visitantes.

Todos los productores que participan en la Feria están incluidos en el sitio Góndola San Luis, un sistema que implementó el Ministerio de Producción para impulsar la venta virtual, en medio de la pandemia por COVID-19.

“En pandemia aprendí sobre marketing”

Alejandro Fragapane estaba de muy buen humor detrás de su puesto. Apurado, sin abandonar sus tareas dijo: “Es espectacular que haya vuelto la Feria porque con ella pudimos crecer y tener una gran cantidad de clientes. Esta es nuestra vidriera, estamos en Góndola San Luis, y nos sumamos a las que organiza Sol Puntano los viernes, pero esto es lo mejor, ya que nos permite llegar en un solo día y en pocas horas a muchísimo público. Aunque nos lo propusiéramos e hiciéramos un gran esfuerzo, solos nunca lo hubiéramos logrado”, expresó.

El “Fraga” contó que durante la pandemia se puso en campaña para estudiar marketing, “y comenzamos con la venta a domicilio. Hicimos más de 2.500 clientes y a todos les avisé que íbamos a estar acá, para que vengan no a comprar lo que yo hago, sino para que conozcan todo lo que se produce en San Luis, que es muy bueno”, opinó.

“Estudié y trabajé en una fábrica de chacinados en España. Aprendí a elaborar jamones, salames y bondiola. Todo con bajo contenido de sodio y una mezcla de especias espectacular”, resumió el productor que no paró un segundo, ni para hablar con la revista El Campo. “Hace unos años atrás me pusieron en la tapa como 'El trotamundos del jamón', porque mi emprendimiento se llama Jamones 7 Cajones”, recordó entre risas el vecino de El Trapiche.

“Nos sentíamos limitados”

“Para nosotros, los pequeños productores que no tenemos un comercio, la Feria representa un punto de venta muy importante, ya que congrega a mucha gente”, opinó Ana, de la finca Don Carmelo, en la que produce huevos de codorniz junto a su esposo.

En tiempo de cuarentena tuvieron que reorganizarse, para readecuar el ritmo y los canales de venta.

“Nos sentíamos muy limitados. Esto nos permite estar en contacto con la gente, es genial porque aprovechamos para contarles sobre los beneficios que tiene este producto, que no es tan conocido, representa un gran aporte a la salud e implica un cambio alimentario. Nos preparamos, juntamos la mercadería y volvimos”, aseguró la productora, que tiene un criadero de 400 codornices en el barrio Rawson.

“La Feria es un respiro”

“Nuestra economía se vio muy complicada debido a la pandemia y la Feria representa siempre un respiro, sobre todo cuando estamos en temporada baja, porque no hay tanta demanda. Pero ahora vinimos preparados, trajimos tres estilos que son los que producimos generalmente: una red ipa, una rubia con trigo y una cream stout que es negra”, dijo Lorena Licciardello, propietaria de la firma de cerveza artesanal Ñanco, junto a su pareja Nicolás Arri.

Sobre el mostrador de madera, descansaba una espumosa jarra de cerveza artesanal que llamaba poderosamente la atención, pero también había envasada. “Por estos días estamos elaborando una cerveza con naranja de Luján. Así que el mes que viene van a poder disfrutarla”, adelantó. 

“Es un espacio necesario”

“Vivo en Cortaderas y a pesar de que es una localidad turística y tenía que seguir elaborando dulces,  el ritmo de trabajo bajó muchísimo. La pandemia nos afectó bastante. Estábamos esperando ansiosos que reabrieran la Feria, estamos felices y agradecidos porque nos volvieron a convocar. El trabajo como productor local es muy importante y estos espacios son muy necesarios”, expresó Liliana Bustos que produce dulce de leche casero, dulces orgánicos de diferentes variedades y licores, junto a su pareja.

“Nosotros participamos en las ferias desde que iniciaron y nos ha servido mucho para crecer, para darnos a conocer y sobre todo para trabajar”, aseveró.

“Es como volver a empezar”

Uno de los puestos que tuvo una buena presentación fue el de la Apícola Anahí, que tenía colmenas tejidas a crochet en marrón  y amarillo. “Somos productores de miel, polen y cera de abejas. Nuestro apiario está en la localidad de Los Manantiales, pero vivimos en la ciudad de San Luis. La Feria es crucial para nuestras ventas porque a nosotros nos facilita la llegada al consumidor con precios accesibles. Valoramos esta oportunidad”, explicó Sandra Maona, y opinó: “Como todos los argentinos, decidimos levantarnos, volver a empezar y seguir para adelante. Noté que la gente está muy feliz de encontrar alimentos frescos de productores locales y a buen precio”.