Trabajadores del plan cosechan y donan verduras a comedores

En plena crisis económica provocada por la pandemia de coronavirus, trabajadores del Plan de Inclusión pensaron en una solución para los sectores más necesitados de la sociedad. En una huerta de aproximadamente una hectárea en la sede del Ministerio de Desarrollo Social, en la ex Colonia Hogar, cosechan hasta cien kilos de verduras por semana y producen conservas que destinan a distintos comedores de la capital. Si bien empezó a trabajar un grupo pequeño, hoy son 80 beneficiarios que participan del proyecto.

El encargado de la huerta, Juan Campos, comentó que la iniciativa arrancó en agosto de 2020 y que a finales de ese año ya tenían la primera cosecha con fines solidarios.

"Queríamos que lo que produjéramos tuviera un fin social. Como estábamos atravesando una crisis por  la pandemia, por la falta de trabajo y la gente que no podía salir, la idea era empezar a producir verduras y hortalizas para ayudar a aquellos en situación de vulnerabilidad", explicó. Actualmente en esta temporada cultivaron tomate, zapallito, zapallo, melón, sandía, maíz, zanahoria, cebolla y berenjena.

En un principio tuvieron el acompañamiento del Ministerio de Producción, que los orientó en lo básico para empezar la huerta y hasta los ayudó con insumos. "Pero en este momento funcionamos independientemente", remarcó.

Campos describió que algunos de los beneficiarios que se sumaron lo hicieron con conocimientos previos de su familia. Pero, a su vez, había surgido el portal "Saber", del gobierno provincial, y aprovecharon los cursos referidos a horticultura que se dictaban, para sumar conocimientos.

"Hay distintos tipos de producción: hay verduras que se hacen en plantines, directamente en invernaderos, y otras por siembra directa, pero lo importante es que se hace todo. No es que compramos, sino que los chicos arman los plantines, los producen, los trasplantan, hacen el mantenimiento y el control de plagas, hasta la cosecha", detalló.

Otro punto que destacó Campos es que buscan que la huerta sea 100% agroecológica. "No se usa ningún tipo de fertilizante químico ni ningún tipo de veneno para el control de plagas, así uno sabe lo que está produciendo y lo que la gente está comiendo", destacó.

El encargado contó que hay gran entusiasmo por parte de los trabajadores y que calcula que por lo menos la mitad de ellos ha iniciado huertas en sus hogares. La intención es ampliar la iniciativa a otras localidades de la provincia y hoy contribuyen en un proyecto de huerta en un salón del barrio Jardín del Sur, de la capital. "Es una actividad que se contagia, que gusta y que aparte es una salida, tiene un fin económico también, porque podés producir los alimentos que consumís en casa", concluyó.

Redacción /NTV