No declaró el acusado de apuñalar a joven en una jineteada

A menos de una hora de haberle clavado un cuchillo a Agustín Vásquez, en una tribuna del club Jorge Newbery en medio de un festival de doma, Marcelo Brayan González fue a la comisaría más cercana y le dio al personal policial su versión del hecho. Se desligó del ataque, de alguna forma. Admitió que hubo una pelea entre él y el otro joven, pero trató de hacerle creer a los policías que la víctima prácticamente se apuñaló sola, por accidente. Sin embargo ayer cuando el fiscal de instrucción 3, José Olguín, le leyó el cargo que le imputó, es decir "Homicidio en grado de tentativa", González ni se animó a repetir la versión que había relatado extraoficialmente a los efectivos. Se abstuvo de declarar en la audiencia, que antes era conocida como indagatoria.

Luego, la defensora del joven de 20 años, Leticia Latini, solicitó una prórroga de la detención de ocho días. La abogada empleará ese tiempo para reunir pruebas a favor de su cliente y tal vez, en el transcurso de la semana, su defendido también declare.

Aunque lo que relató en la Comisaría 8ª la noche del domingo 13 no puede ser valorado por el fiscal, pues fue declarado de manera espontánea e informal en una seccional policial, esa versión que, por un lado resulta increíble, no encaja ni por asomo con lo dicho por los testigos de la agresión y con las leyes de la física, teniendo en cuenta la forma y el lugar donde fue herido Vásquez.

Según González, que también es conocido como Marcelito Juárez, era Vásquez quien tenía el cuchillo. Dijo que, en medio de la pelea, quiso quitarle el arma blanca y en eso el cuchillo se cayó y, junto a él, también se desplomó la víctima. Cuando el joven cayó sobre el piso de la tribuna se clavó el puñal accidentalmente, aseguró.

Pero eso, explicó una fuente allegada a la investigación, es imposible, porque para empezar, el arma debió quedar parada, en punta y el damnificado haber caído de costado, tal vez con los brazos hacia arriba o extendidos.

La víctima fue acuchillada en el costado izquierdo del abdomen, cerca de las costillas. El puñal, que es usado para carnear animales y tenía una hoja de 13 de centímetros de longitud, le atravesó el colon de lado a lado. De hecho, en la primera de las tres cirugías que los médicos del policlínico le hicieron, tuvieron que operarlo con el arma aún en su cuerpo.

Todo demuestra que fue un puntazo limpio, directo y artero. Además de la lesión que lo tiene en terapia intensiva, Vásquez no presenta otro tipo de herida, ni siquiera un moretón. Lo mismo que el imputado.

"También hay un testigo que lo vio a González antes de la pelea con el cuchillo y luego durante la pelea. Y vio al otro joven salir herido", comentó el fiscal.

En su momento, la novia de Marcelito Juárez dio una versión similar a la de él. Dijo que quien empuñaba el cuchillo era la víctima y que su pareja quiso quitárselo, pero no pudo ver más, a causa del tumulto que había en la tribuna norte del Jorge Newbery.