Mekoroke hace tres presentaciones en Merlo

Para celebrar la vida, curar los males o evitar las emociones negativas, los africanos mueven sus cuerpos al ritmo del tambor y sacan todo lo que tienen adentro para liberarse o alegrarse. Rodrigo Castillo y Victoria Brocca viajaron en 2014 al continente negro para conocer y palpar de cerca la cultura y las tradiciones. En esos días absorbieron conocimientos que tres meses después volcaron en Mekoroke, la escuela de danza y percusión africana que fundaron en Carpintería, y que actualmente dicta sus talleres en el teatro Amigxs de Merlo.

El proyecto cuenta con un ensamble de músicos y bailarines que ensayan todo el año para salir durante el verano por distintos lugares de la Costa de los Comechingones para mostrar la cultura africana que los conquistó en principio a ellos, y ahora buscan que apasione también al público que los va a ver.

La temporada 2023 comenzó para el grupo con la actuación que tuvieron en la Fiesta de la Cerveza en Carpintería. Ahora les toca recorrer la Villa de Merlo, una localidad con la que guardan estrechos lazos. El itinerario de shows comenzará hoy a las 20 en el Paseo de las Artes, en la plaza Sobremonte. Sigue mañana a las 21 en el restó La Bonita y culmina el sábado en la casa de té Chanis, a las 20, todos con entradas a la gorra.

Para agendar

Hoy, mañana y el sábado

Horarios: Hoy y el sábado, a las 20. Mañana, a las 21.

Lugares: jueves: Paseo de las Artes; viernes: La Bonita, y sábado: Chanis en Merlo

Entrada: a la gorra

Brocca adelantó que el espectáculo cuenta con dos bloques de veinte minutos donde se interpretan ritmos y danzas de Guinea, Malí y Senegal. "Cada show es diferente, pero mantenemos la misma dinámica donde la percusión se siente hasta en el corazón", expresó la bailarina, quien, además de estar acompañada por Castillo, compartirá escenario en esta serie de presentaciones con Gabriel Castillo, Fátima del Pino y Mauricio Calderón.

La artista indicó que aunque África es un continente lejano geográficamente de Latinoamérica, tiene muchas conexiones con las tradiciones que habitan en los países de este lado del mundo.

"Mostramos en el espectáculo la importancia que tiene el afro sobre las raíces de nuestro continente. La idea es que el público pasee junto a nosotros por diferentes regiones africanas y encuentre las razones de por qué se baila cada danza o se interpreta un ritmo en particular", explicó.

Victoria agregó que la africana es una danza que no se conoce demasiado, pero que "quienes la bailan conectan al instante y se dejan llevar por el ritmo y los movimientos. Sentimos que viene del corazón".

Rodrigo y Victoria decidieron nombrar Mekoroke a la escuela-ensamble porque significa "mi hermano" en la etnia bambara de Malí. "Las personas que se acercan al taller no se conocen y con el paso de los meses, al llegar a diciembre, terminan como hermanos. Somos como una gran familia", concluyó la profesora.

Redacción/MGE