Cumplió su promesa e hizo una Copa del Mundo gigante en su casa

Este mes se cumplirá medio año desde que la Selección Argentina se coronó campeona del mundo en Qatar. Sin dudas fue un hecho deportivo histórico para el país, que generó sentimientos de los más diversos a lo largo de todo el globo terráqueo. Emanuel González sigue viviendo esa pasión mundialista y hace unos pocos días pudo cumplir con su palabra de construir un modelo gigante de la copa con materiales que fueron descartados.

"Todo esto empezó porque hice una promesa: si Argentina ganaba iba a realizar una Copa del Mundo con chatarra, como todas las otras esculturas que tengo y he hecho. Empecé de a poco a hacerla, me costó porque nunca encontraba el tiempo por mi trabajo, al que le dedico casi todo el día", comentó González y, entre risas, agregó: "Es la primera promesa que hago en mi vida, nunca le prometí nada a nadie".

El joven de 36 años asumió un nuevo compromiso este 2023 como nuevo jefe de Eventos del Municipio. Recordó que ya deben haber pasado unos nueve años desde que hizo su primera escultura, un Transformer que está parado en la puerta de su casa y que ha resistido todas las inclemencias climáticas.

"Toda la estructura la hice con cuadros de bicicletas; la idea original para el resto era que fuera de chatarra, como por ejemplo la puerta de un auto, alguna heladera vieja en desuso, un lavarropas, cosas así. Hoy en día eso está medio complicado porque no se descarta tanto, son cosas que las personas las venden", explicó.

El artista dijo que mientras pasaban los días y pensaba alguna posible alternativa de materiales para usar, Villa Mercedes fue azotada sin piedad por el terrible granizo del 26 de enero. "Me preocupé por eso, porque también estoy comprometido con trabajos barriales. Una tarde, en un recorrido vi que algunas personas empezaron a sacar los tanques de agua que se habían roto. En una cuadra vi tres, después más y más. En ese momento le dije a mi señora que iba a hacer la copa con esos restos y los empezamos a cargar en la Traffic que tengo", contó.

Así fue que el proyecto comenzó a tomar forma. Emanuel fue cortando las partes que le hacían falta de acuerdo a su diseño y notó que de esta manera podía avanzar mucho más rápido. Aunque no sacó una cuenta precisa de cuánto tiempo le tomó finalizarla, estima que fueron alrededor de quince días, con entre seis y ocho horas de trabajo diario.

"Fui juntando todo, atando con alambre la estructura de hierro del interior. Luego entre plástico y plástico los uní con tornillos para chapa para que queden fijos. Después vino el tema de la pintura, que la terminé haciendo con algunos aerosoles dorados, porque últimamente no viene de ese color oro, es muy complicado conseguirla", expresó.

La copa gigante mide tres metros con veinte centímetros y pesa alrededor de unos cien kilos. Para poder finalizarla tuvo que hacerlo desde arriba del techo de su casa, ya que la altura del andamio con el que contaba no le era suficiente.

"Esta es la más grande que he hecho. La anterior era un Increíble Hulk de unos dos metros con veinte que hice con paragolpes y capós de autos, y que doné a un comedor", señaló el escultor.

González dijo que por el momento el trofeo se quedará en su casa del barrio Estación, pero que desearía poder colocarlo en una plaza en homenaje a los campeones del mundo. "La sacamos entre cuatro a la puerta. Ya han venido muchos vecinos a sacarse fotos, ha sido un griterío de niños. Es algo que llama bastante la atención", sostuvo.

Redacción/MGE