El detenido por el crimen del policía se despegó del caso y resurgen las dudas
El imputado por el asesinato de Renato Fuentes sostiene que "nunca le quitó la vida a nadie". La esposa de la víctima, sin ayuda, critica al oficial que acompañó a la víctima en el procedimiento. Y el fiscal del caso dice que no cierran ninguna hipótesis.
El asesinato del oficial Fuentes, ocurrido hace poco más de un mes, se produjo durante un robo que derivó en un tiroteo en el que Fuentes fue alcanzado por un disparo mortal. Desde entonces, la causa ha generado múltiples interrogantes, especialmente porque Lescano, según afirma, no tiene antecedentes que lo vinculen directamente con crímenes de esta magnitud. Aun así, fue detenido en un operativo conjunto y se lo acusa de ser el autor material del homicidio, basándose en testimonios y elementos que, según él, han sido manipulados o presentados fuera de contexto.
Lescano sostiene que ha proporcionado información que podría llevar la investigación hacia el verdadero autor del crimen, a quien identifica como “Flavio”, primo “de un tal Vieyra”, un delincuente que falleció en el Hospital “Madre Catalina Rodríguez” tras ser arrestado en circunstancias no del todo esclarecidas a poco de cometerse el crimen de Renato, en cercanías del lugar.
“Flavio” es, según Lescano, quien debería ser investigado a fondo, pero insiste en que las autoridades lo han ignorado y prefieren cerrar filas en torno a su imputación. “Desde el principio se enfocaron en mí porque no tienen otra línea que mostrar. Ya le dije a la Dirección de Investigaciones (DDI) lo que sé, pero no me escuchan”, denunció.
La defensora Tobares ha solicitado que se tome en cuenta la versión de su cliente y ha instado a que se investigue a fondo la presunta participación de “Flavio”.
“No se puede juzgar a una persona con pruebas incompletas y con testimonios que son, cuanto menos, contradictorios”, declaró Tobares, quien además denunció que la defensa ha enfrentado obstáculos para acceder a todas las pruebas disponibles.
Las dudas de la viuda
Nancy Muñoz, viuda del oficial Renato Fuentes, exige justicia y pone bajo la lupa el accionar de la Dirección de Investigaciones en el caso. Según Muñoz, la noche del asesinato los efectivos policiales llegaron a la escena y, en lugar de preservar pruebas, ordenaron al resto que se retirara: “Salgan de esto, nos encargamos nosotros”.
Este proceder generó fuertes sospechas en la familia. Además, una testigo, familiar de Julio Lescano, asegura que la Policía realizó un allanamiento en su casa a las cinco de la mañana y, tras retirarse, dos oficiales volvieron para hablar con Lescano, quien ya era considerado prófugo. “Si lo estaban buscando, ¿por qué no actuaron? Hay cosas que no cuadran”, señaló Muñoz, poniendo en duda la transparencia de la investigación.
Muñoz continúa esperando respuestas a casi 60 días del asesinato de su esposo. “Necesito gente que me ayude y no que me mande anónimos”, reclamó, mientras persisten las dudas. El subcomisario Abel Caro, quien estuvo en el procedimiento por el asalto como apoyo de Fuentes, no presentó rastros de pólvora tras cuatro pruebas, a pesar de que hubo 21 disparos. “¿Cómo puede explicar que a Renato le metieron cuatro tiros y el otro ni siquiera disparó?”, cuestionó la mujer.
La viuda cree que hubo más involucrados y que Fuentes fue sorprendido. “El objetivo fue liquidarlo”, sostuvo, con sus críticas al proceder de Caro y la falta de compromiso de los policías que, según ella, le han dado información extraoficial pero se niegan a declarar. Mientras tanto, Muñoz vive con sus tres hijos en Villa Dolores, con haberes adeudados y sin pensión, enfrentando sola un duelo lleno de incertidumbre y dolor.
El fiscal
En una reciente entrevista con Radio Lafinur FM, el fiscal de instrucción Marcelo Saldaño aclaró que la investigación en torno al caso que involucra a Julio Lescano sigue su curso sin excluir ninguna línea. "Quiero llevar tranquilidad: no empapelamos ni acusamos a nadie sin fundamentos", aseguró Saldaño. Según sus declaraciones, las pruebas recolectadas apuntan con grado de certeza a que Lescano fue uno de los autores materiales del hecho investigado y estuvo presente en el lugar. "Si se presentan nuevas evidencias que apunten a otras personas, las consideraremos seriamente", añadió y subrayó que el derecho de defensa del imputado está garantizado.
Saldaño explicó que la investigación penal no se centra únicamente en Lescano ni en el delincuente fallecido durante el hecho. "Puede haber otros cómplices que facilitaron elementos o colaboraron, incluso sin haber entrado al domicilio", dijo.
Además, el fiscal destacó que no se descartan posibles vínculos con funcionarios o miembros de la fuerza, aunque no hay elementos para sostenerlo en este momento. "Toda línea será investigada para garantizar que los responsables paguen por sus actos de acuerdo con la ley", concluyó.
A casi dos meses
Viernes 20 de septiembre: ocurre un violento asalto en una casa de dos plantas en el loteo El Prado. Dos hombres, Lescano y Mauro Maximiliano Vieyra Villegas, irrumpen en la vivienda, donde una madre y su hijo pequeño estaban desprevenidos. Los delincuentes exigen dinero y las llaves de una supuesta caja fuerte. Las víctimas son golpeadas, amenazadas y maniatadas mientras los asaltantes revisan toda la casa.
Los asaltantes se llevan dos millones de pesos, tres mil dólares, armas de fuego, joyas y otros objetos de valor. Un familiar de las víctimas que estaba en Tucumán observa el robo en tiempo real a través de cámaras de seguridad y notifica de inmediato a la Policía.
Al recibir el aviso, los oficiales Caro y Fuentes llegan a la escena y tratan de interceptar a los delincuentes, quienes responden abriendo fuego. El enfrentamiento resulta en un intercambio de disparos en el que se encuentran 21 vainas servidas. El oficial Fuentes recibe 4 impactos de bala, uno en el cuello, que le provoca la muerte en el lugar. Su compañero Caro logra repeler el ataque y resulta ileso, pero no puede evitar que los delincuentes huyan.
Luego del enfrentamiento, la Policía lanza un operativo cerrojo en la zona serrana de Cortaderas. Vieyra, herido de gravedad, es capturado en las cercanías del lugar del asalto y trasladado al Hospital de Merlo: fallece al día siguiente por las heridas de bala recibidas.
Domingo 22 de septiembre: Lescano, quien había logrado escapar, es detenido en un puesto policial de La Punilla mientras viajaba como acompañante en un Citroën C3 Aircross y portaba un documento de identidad falso. Según la Policía, este documento pertenecía a otro bonaerense fallecido, lo que sugiere su intento de fuga hacia otra provincia.
Martes 24 de septiembre: Lescano es formalmente imputado por los delitos en relación con el asalto, el robo y el enfrentamiento con la Policía.


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