Indignación y bronca por los despidos en Vialidad Provincial
Aseguran que en la última semana fueron cesanteados unos veinte trabajadores del organismo. Señalaron que la mayoría son empleados con varios años de antigüedad.
Angustia, crisis, dolor y malestar son los sentimientos que aquejan a los trabajadores estatales en la provincia. Además del desdoblamiento salarial, el gobierno de Claudio Poggi está dejando sin trabajo a muchos puntanos y puntanas, la mayoría de ellos sin causa alguna y sin recibir una justificación. En Vialidad Provincial, la cuenta llega a más de cuarenta personas desafectadas, solo durante este mes. Un extrabajador, quien prefirió resguardar su identidad por miedo a las represalias, confirmó que más de veinte empleados fueron despedidos el 1° de febrero y a esto se les sumaron otros veinte más esta semana.
La notificación la recibieron el mismo día cuando se presentaron a trabajar. A través de un cartel con varios nombres y la firma de Martín Alitta, subdirector de Contrataciones y Control de Gestión de Vialidad Provincial, les notificaron que prescindían de sus servicios, por lo que también les prohibieron la entrada.
"Ya la otra vez hubo una tanda de gente que fue despedida, en la cual estoy yo. Esto fue el 1° de febrero, el día que vencían nuestros contratos. Ahora, aparentemente han echado a más gente. Han cesanteado o mandado al Plan a gente que trabajaba en Vialidad. Indudablemente, el trato que están teniendo con la gente no es bueno", explicó el extrabajador.
Afirmó que desde el 10 de diciembre, los empleados de Vialidad Provincial se encontraban en sus puestos de trabajo, pero sin tareas para realizar. Nadie les brindaba respuestas, ni explicaciones, ni les encomendaban trabajos.
"Por ejemplo, trabajadores que venían desde el gobierno de Alberto Rodríguez Saá estaban en el patio, sentados, sin poder hacer nada. Como castigados, maltratados. Les decían: 'No hagas nada hasta que yo te diga'. Así estuvieron desde el 10 de diciembre hasta hoy, dando vueltas en el patio de Vialidad. Una vergüenza, un maltrato que no se puede aceptar por parte de ningún gobierno", indicó.
La fuente consultada expresó que el malestar era generalizado. Dijo que luego de su despido, se comunicó con otros trabajadores para conocer sus situaciones y comprobó que a muchos les había pasado lo mismo: los habían dejado sin empleo y sin dar causas.
Desde el 10 de diciembre, cuando asumió la gestión de Poggi, los trabajadores de Vialidad Provincial están sin tareas asignadas y nadie les brinda respuestas. Afirman que sufren maltrato y no hay responsables.
Muchos de los desafectados eran empleados que contaban con 7, 8 y hasta 10 años trabajando para el Estado provincial. Algunos monotributistas, otros con contrato temporal, y las medidas llegaron también a algunas plantas permanentes.
"Llegar a tu trabajo de hace diez años, como yo, y que haya un listado en la puerta de los que no podían entrar a Vialidad sin una reunión previa para decirte: 'Hasta acá llegaste'... Llegar y tener que volverte a tu casa, como si fueras un delincuente, está mal. Yo entiendo el cambio, no estoy en contra de eso, pero el maltrato que hay y la soberbia que están teniendo con los muchachos es impresionante. Tienen que parar un poco", expresó.
El 1° de febrero fueron más de veinte y esta semana, una cifra similar. Dicen que algunos eran monotributistas, otros contratados y el resto, trabajadores de planta permanente del Estado.
"Se terminó el contrato para muchos, para otros hay cambio, para otros que tienen otro régimen laboral hay otras formas. Yo hablé un par de veces para saber qué iba a pasar con los contratos, pero nada. El 1° de febrero fuimos 21 o 22. Ahora, a algunos los han vuelto al Plan de Inclusión, a otros los han dado de baja, a otros les dijeron que no entran más a Vialidad. Hablé con otro compañero a quien también lo han dejado sin trabajo. Yo tenía un contrato como prestador de servicios hace más de diez años; me considero un empleado del Estado", agregó con desilusión y bronca en su voz.
El maltrato y el hostigamiento también se sufren en otras áreas del gobierno provincial. "Esta cuestión que ya la estoy viviendo, la estoy notando en el ‘Carrillo’, en Educación. Yo estoy hace años trabajando, escucho muchas cosas que terminan siendo, en definitiva, persecuciones. Se la están agarrando con gente que no tiene nada que ver, con trabajadores que han laburado, que cumplían sus funciones", dijo.
La mayoría de los despedidos exige saber los motivos y que alguien dé la cara. Muchas familias dependen de esos salarios y piden que se los vuelva a contratar, porque "solo cumplen con las tareas asignadas, solo trabajan".
Redacción
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