En un gesto solidario, los asadores de Justo Daract compartieron el premio

En tiempos duros de crisis económica y ajustes, los vecinos de Justo Daract eligieron no quedarse en lamentos y festejaron su aniversario a lo grande. La ya tradicional Fiesta de la Vaquillona Asada con Cuero convocó a más de quince mil personas que colmaron el Anfiteatro de los Sueños para disfrutar de la gastronomía y también de los shows que pasaron por el escenario.

Esta vez, el premio para el mejor era de 1.000.000 de pesos, pero los concursantes habían acordado repartirse el dinero entre todos, como un reconocimiento mutuo por el gran trabajo que significó cocinar con ráfagas de hasta 50 kilómetros por hora. Quince equipos de asadores encendieron los fuegos a las 10 de la mañana y trabajaron durante todo el día, batallando contra el viento, para preparar la carne que el público degustó a la noche en forma de miles y miles de sándwiches.

"Es muy emocionante porque es un evento totalmente gratuito, que se hace con toda nuestra cultura artística, con nuestro propio equipo de sonido, iluminación, pantallas y con nuestra gente. Es un gran esfuerzo en un momento difícil, pero la ciudad se merece festejar su cumpleaños de esta manera", expresó el intendente Alfredo Domínguez.

El mandatario agregó que, incluso, el encuentro ya trascendió las fronteras de la localidad porque los visitaron muchas personas de Villa Mercedes, Buenos Aires, Villa Valeria, Huinca Renancó, Vicuña Mackenna, Laboulaye, Río Cuarto y Rufino, entre otros lugares, en gran parte atraídas por poder asistir a un festival de los que ya no son tan comunes en estos tiempos en Argentina.

El principal atractivo del evento es la competencia entre los equipos que tienen la tarea de asar las quince vaquillonas enteras, todas solventadas por el Municipio y con un aporte a modo de incentivo de $50.000 para cada concursante.

Tras repartirse el premio el intendente consideró: "Lo habían hablado entre ellos y cuando anunciamos el ganador, que fue el puesto número 15, subieron al escenario y contaron que iban a repartirlo. Fue muy lindo y muy emocionante".

Fue una fiesta que se extendió a lo largo de todo el día. Hubo una primera degustación a las 13, en la que sacaron de las parrillas cortes como mollejas, chinchulines, entrañas, entre otros.

Los espectáculos, tanto de música como danza, arrancaron a eso de las 19 en el anfiteatro y para las 22:30 aproximadamente empezaron a armarse las filas en cada uno de los puestos.

La celebración se extendió hasta aproximadamente las 2:30 de la mañana, cuando el grupo Canta mi Pueblo le ponía música a una noche que recordó épocas de más algarabía y ayudó a olvidar por un rato los malos tragos que se viven en el país.

"Es difícil hacer estos eventos de concurrencia masiva, que requieren una gran organización y un acompañamiento del público. Siempre hay algo para mejorar, pero nos deja una enorme satisfacción porque esto es un abrazo inspirado en el amor que tenemos por nuestro pueblo", expresó el intendente.