Dospu peligra: posibles recortes por la emergencia financiera

La obra social de los trabajadores universitarios peligra por la grave situación financiera que están atravesando. Indicaron que, en los últimos meses, esto se agudizó aún más. Desde la dirección de Dospu indicaron que es posible que se tengan que redefinir las maneras de la prestación de los servicios que se brindan. El viernes habrá una asamblea extraordinaria para definir lo que pasará.

El director de la obra social, César Almeida, comentó que hay déficit y que, por lo mismo, algunos pagos podrían no llegar a realizarse. “Lo que le pasa a Dospu es lo mismo que les está ocurriendo a todas las obras sociales y, en particular, a las universitarias. Esta situación se está debatiendo a nivel del Congreso de la Nación. Hubo 4 dictámenes en Diputados, donde 3 declaraban la emergencia de las obras sociales universitarias. Esto es consecuencia de la pérdida salarial que estamos teniendo el personal universitario, que se estima que es del 50%, traducido, igualmente, en los ingresos de la obra social”, dijo.

“A esto se le suma que hasta diciembre, la inflación acompañaba los valores de las prestaciones médicas y de los ingresos de la obras sociales. A partir de diciembre se incrementaron abruptamente las prestaciones médicas y nuestros sueldos no”, agregó.

El director apuntó que, a lo largo de los meses, manifestó la situación en el Consejo Superior de la Universidad Nacional de San Luis. “Los otros días fui a explicarles lo que está sucediendo y lo importante que es que, de manera conjunta, tomemos una decisión para salir del paso. Hay varias opciones. Las obras sociales se mantienen con un 3% del aporte personal y el 6% del patronal para un dictado de prácticas. En Dospu siempre brindamos más que ese básico, pero llega un momento que las tecnologías avanzan y los precios son muy elevados, no alcanza con el 3%”, afirmó.

Una de las soluciones sería elevar el aporte de la contribución de los trabajadores, es decir del 9% a un mínimo del 11%. “Hay que ver cómo se hace para llegar a esa diferencia. O restringir algunas cuestiones que podrían estar en segundo plano”, expuso. También contó que el mayor problema fue la liberación de precios desde diciembre: eso afectó directamente a la obra social.

Si se llegasen a recortar los servicios desaparecerían implantes dentales, medicamentos de uso común, tomografías y medicina para diabetes (en pastillas), entre otros ejemplos. “Una cuestión intermedia sería aportar algo más, un punto más, que se puede analizar; y prestaciones que están al 90% o 100% retrotraerlas al 70%, sobre todo, es un deseo de poder seguir brindando la financiación”, indicó.

“Tuvimos un superávit en diciembre, pero solamente el medicamento, en el mismo mes de diciembre, aumentó el 82% y a partir del 2 de enero, comenzaron todos los otros aumentos. Las prestaciones aumentaron entre el 350% y 400%. Por eso venimos enviando notas y poniendo en conocimiento a las autoridades para que observen lo que iba a pasar. Uno administra de la mejor manera, pero llega esta situación de bajos ingresos y altos precios, a cualquiera le da un desbalance”, concluyó Almeida.