Gremios le exigen al Estado un incremento salarial urgente

La crisis se profundiza y el gobierno provincial sigue con una política de ajuste brutal e insensible. Por eso, la Asociación de Profesionales y Técnicos de la Salud (APTS), junto al Sindicato de Empleados Provinciales (SIEP), el Sindicato de Judiciales Puntanos (SiJuPu) y la Unión de Trabajadores de la Educación Provincial (UTEP-SL), ha canalizado un nuevo pedido al gobernador Claudio Poggi para que implemente “políticas concretas” destinadas a recomponer los salarios de los trabajadores de la administración pública.

 

“Ante el escaso aumento del 15 por ciento otorgado luego de seis meses de congelamiento salarial, y con sueldos que están por debajo de la línea de la pobreza, e incluso de la indigencia, consideramos imprescindible una recomposición salarial urgente y sustancial”, señalan en un comunicado.

 

Los sindicatos esperan que la solicitud “sea atendida con la urgencia que la situación amerita”. Además, indicaron que buscan que se establezcan a la brevedad mecanismos de diálogo y de trabajo necesarios que puedan conducir a una solución que sea "justa y equitativa". 

 

El Estado puntano confirmó hace pocos días que no concederá ninguna actualización a los empleados de la administración pública con los haberes correspondientes al mes en curso, percibidos ayer. Eso sí, y en un intento patético que intentó servir como consuelo, en la difusión de esta información recordaron que en “otras provincias siguen pagando los sueldos de manera desdoblada o, incluso, una parte con bonos emitidos por su propia tesorería”.

 

Las actualizaciones concedidas por Poggi hasta el momento han sido absolutamente insuficientes, lo que explica la profunda desesperanza que impera en la provincia. Primero, el Estado puntano concedió aumentos en los haberes solo a directores de escuela y un bono de 70 mil pesos. Posteriormente, fue anunciado el magro 15% de incremento en los haberes que generó bronca e indignación. 

 

El sufrimiento que atraviesan los sanluiseños contrasta con la buena fortuna de la planta de funcionarios del Gobierno, que a pesar de las promesas realizadas en campaña por Poggi de encabezar una administración austera, se ha multiplicado en su número, con haberes que, en varios casos, son superiores a los 2 millones de pesos. Esta realidad da por tierra con la aseveración de sueldos “controladitos” que manifestó el Gobernador.

 

La reticencia que exhibe el Ejecutivo para dar una recomposición salarial significativa (la pérdida de poder adquisitivo se acrecienta con una inflación acumulada que supera el 100 por ciento) se da en un contexto en el que el Estado puntano tiene un ingreso constante de fondos, a contramano del trillado discurso oficial de que “no hay plata”.

 

En el primer semestre de este año, San Luis recibió más de 300 mil millones de pesos del gobierno nacional en concepto de coparticipación federal, lo que constituye un registro sin precedentes. Solo en mayo fueron girados casi 109 mil millones de pesos, un aumento del 372 por ciento en relación a igual período del año anterior. 

 

Además, para la tesorería del Ejecutivo se genera un ahorro considerable con la parálisis casi absoluta de la obra pública, que solo se mueve a cuentagotas con iniciativas aisladas o planes como “Construyendo Con Tu Pueblo”, que destina menos del 10 por ciento de los fondos que recibe la Provincia y que palidece con la notable dinámica que exhibió este sector en gestiones anteriores.