“El domingo ganamos con el Tuki Tuki”: Alberto volvió a Nogolí 

En un salón de Nogolí, entre banderas celeste y blanco, y carteles que proclamaban la consigna del espacio —“Somos el camino”—, Alberto Rodríguez Saá volvió a pisar fuerte en el departamento Belgrano. Lo hizo como presidente del Partido Justicialista, pero también como memoria viva del proyecto político que transformó Nogolí y sus alrededores. Las mesas, cubiertas con manteles estampados con frutas y termos compartidos, daban al acto un clima cálido, de cercanía vecinal. Alberto se sentó junto a Fernando Yanzón y Lorena Amieva, candidatos a senador titular y suplente, la postulante a intendenta municipal Claudia Pinelli y los integrantes de la lista a diputados Cristian Álcaraz y Nancy Villegas. Firmó afiches, conversó con los vecinos y dejó claro que “la política se hace con la gente, cuerpo a cuerpo, mirando a los ojos”.

Desde el centro de la escena, disparó sin rodeos:
“Lorenzetti y Leyes son patoteros. Y Juan Carlos García… ese ni siquiera califica como patotero, pero es el peor de todos”, lanzó ante la militancia. Y no se contuvo: “La chica de la Villa también traicionó al peronismo”, dijo, apuntando contra quienes, según sus palabras, se alejaron del camino justicialista.

El acto combinó emoción, memoria y llamado a la acción. “Nosotros hicimos el dique, la autopista, soñamos un hospital grande entre Nogolí y la Quebrada. Dejamos una planta modelo de agua potable. Hoy todo está desmantelado. Tomamos los sueños del pueblo y los hicimos realidad”, afirmó.

Yanzón, por su parte, fue concreto: “La planta de agua era de primera. Hoy no funciona porque no compran ni los productos básicos. Hay abandono. Hay desprecio por el pueblo”.

El mensaje de fondo fue claro: el miedo no puede decidir las elecciones. “Si ganamos el domingo, el lunes empiezan a contar los días para irse. El miedo lo tienen ellos, por eso aprietan. Pero la gente ya se dio cuenta”, dijo Alberto. 

La consigna, ya convertida en eslogan, recorrió toda la noche: “A la primera ni la mires. A la segunda, el tilde le damos. Tuki Tuki”.