Abandonados y olvidados: no tienen luz y piden una solución urgente

Cualquiera que tenga complicaciones con el acceso a la energía eléctrica, sabe lo difícil que se hace la vida. En verano, los alimentos se descomponen con rapidez. La posibilidad de tomar un vaso de agua fresca, es un sueño imposible. En invierno, no se puede usar ni un caloventor para paliar las bajas temperaturas. De noche, mirar en la oscuridad es una odisea. Así viven distintas familias en el interior profundo de San Luis. Esta vez, vecinos de la zona de Toro Negro, piden soluciones urgentes. 

"Vivo en el camino vecinal de Toro Negro al Palinguante, si alguien viene por la ruta tiene que entrar por el ingreso del Parque Eólico, que queda en el Km 63; una vez que se tope en la calle de tierra, tiene que doblar hacia la derecha. Mi casa está a unos 300 metros del Parque Eólico. Esto es así, el senador Juan Carlos García nos facilitó hace 4 años una pantalla solar, pero se le han roto las baterías. He estado pidiendo ayuda a todos, pero nadie me da una solución. Nosotros queremos que nos puedan dar el tendido eléctrico, ya que las pantallas solares duran 4 años. Además, con las pantallas no podemos conectar nada, solo se puede usar para la luz", lamentó Xiomara Solange Quiroga, en diálogo con El Diario de la República.

Según describió, ha hablado con la intendenta de Los Manantiales, Carolina Salinas, y con su marido David Lucero, que es concejal. Pero lo único que le han manifestado son promesas que no cumplen (con afirmaciones como "mañana vamos a tu casa" o "un día antes te aviso"). Por otra parte, el senador Juan Carlos García en teoría presentó una nota al Gobierno, pero por lo pronto todo es silencio, no hay novedades. Incluso Xiomara presentó una carta al Gobernador, de la cual tiene un expediente. 

"El día de las elecciones, la intendenta nos dijo que nos iba a colocar la luz, pero todavía la estamos esperando; a los pocos días se nos rompió la pantalla. Encima nos dijo que ella le había dado luz a otras dos familias. Yo digo ¿Por qué hizo hasta lo imposible para darle a los demás y a nosotros nos tiene olvidados? Acá donde vivo hay unas 6 familias pero no se animan a hablar", apuntó.

Los dramas diarios

Xiomara graficó que el problema realmente les complica la vida. Su hija de 8 años, por ejemplo, tiene que estudiar y hacer las tareas escolares a oscuras. Por otra parte, el papá de Xiomara es discapacitado visual y cuando cae la noche tiene que estar en un solo lugar por miedo a que sufra una caída. 

"Acá no se puede tomar nada fresco ni tener alimentos como carne o cualquier otro producto esencial para la comida porque se echa perder. Las autoridades tienen que cumplir, para eso están, tienen que hacer trabajos para el pueblo, no para los bolsillos", concluyó.