REM: renuevan el sitio web provincial que publica los datos del tiempo

El Ministerio de Ciencia y Tecnología tiene la mirada puesta en la Red de Estaciones Meteorológicas (REM). En el último mes dispuso la revisión de los cincuenta y siete centros de medición distribuidos a lo largo y ancho de la provincia, y realizó un relevamiento del estado en el que se encuentran cada uno de los sensores climáticos. También señalaron que están en proceso las licitaciones para la compra de la tecnología que debe reemplazarse y del equipamiento faltante para que cada una de las estaciones pueda recabar la mayor cantidad de datos posibles.

“El sistema está en funcionamiento, pero a algunas les faltan dispositivos para medir todas las variantes climáticas, que nunca se instalaron, por eso no se pueden volcar todos los valores a la página”, dijo Guillermo Concha que está a cargo de la REM.

El funcionario también comentó que hace un mes pudieron volver a cargar los gráficos estadísticos y proyectar las mediciones mensuales de algunas localidades, al renovar los sensores. Y explicó que los datos se actualizan casi en tiempo real, tanto los del viento como los de humedad y temperatura, las 24 horas y de manera automática.

“Estas mediciones son consultadas por diversos organismos públicos, además de productores agropecuarios y empresas privadas, entre otros, que requieren conocer las condiciones climáticas de la zona donde van a trabajar. Por ejemplo, la constructora Rovella Carranza necesitaba conocer la intensidad y dirección del viento en la ciudad de La Punta, para definir la instalación de ‘una pluma’, en la obra del Centro de Alto Rendimiento Deportivo”, señaló.

Alicia Bañuelos, ministra de Ciencia y Tecnología, manifestó que en los últimos años el sistema sufrió el deterioro lógico por la falta de mantenimiento e inversión y que se perdieron los datos de los últimos seis meses. Por eso la cartera tiene como objetivo recuperar cada centro de medición ampliar el flujo de datos sumando a la REM nuevas estaciones.

 “Nos reunimos con la dirección de San Luis Agua y el INTA para coordinar una estrategia que nos permita obtener nuevos registros a los que podrán tener acceso todos los organismos y las personas que lo requieran. La idea es brindar más datos sobre las precipitaciones, agregar los niveles de diques y otras variantes a la misma plataforma, completar las estaciones existentes e instalar otros polos donde sea necesario”, aseguró Bañuelos y afirmó que uno de los puntos de interés para las nuevas instalaciones es la zona de río Nuevo.

Bañuelos también destacó que el Gobierno buscará retomar contacto con la Agencia Climática NOA, de Estados Unidos, con la cual se firmó un acuerdo para intercambiar datos que beneficiarían la detección temprana de fenómenos climáticos en la provincia.

“Es un organismo al nivel de la NASA, que se encarga de analizar factores climáticos. Poseen tecnología muy precisa, con fórmulas y cálculos matemáticos, que les permite adelantarse a la cantidad de agua que puede llover en un tiempo determinado”, indicó y agregó que el gobierno anterior no cumplió con el acuerdo y por lo tanto se cayó. Para poder retomarlo, el ministerio buscará primero poner todo el sistema a punto.

José Jerez, quien está a cargo de la Autopista de la Información, confirmó que el nuevo sitio está en proceso de actualización y que estima que en dos meses estará en funcionamiento con los datos de las estaciones que se sumen.

“La ministra nos pidió una renovación de la página del REM, porque ya quedó algo antigua, tanto en diseño como en información. Sumaremos los datos de las precipitaciones y cotas de ríos y diques. En general, todo lo referente al sistema hídrico que nos aporte San Luis Agua y las estaciones del INTA”, expresó Jerez.

“En la provincia contamos con un especialista de primer nivel, Vicente Barros. Cuando tengamos todo coordinado le pediremos que haga una revisión de cada dispositivo y de la plataforma en sí. Queremos que retome su función inicial que es poder llevar un registro del calentamiento global”, concluyó Bañuelos.