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“No recuerdo cuándo consumí carne por última vez”

El precursor de la alimentación consciente en argentina le contó a Cooltura las claves para alimentarse mejor, entre las que destaca consumir más alimentos naturales y aprender a leer las etiquetas de los productos. El periodista que está a punto de presentar su noveno libro, asegura que ahora siente más energía y se enferma mucho menos.

Por Noelia Barroso
| 21 de agosto de 2018

Contra todas las concepciones argentinas, Pablo Martín se subió al tren de la alimentación consciente y hace diecisiete años que no consume carne. El periodista y chef contó que el único secreto para alimentarse mejor es ingerir alimentos naturales y aprender a leer todas las etiquetas.

 

La alimentación consciente es, según establece, ser consciente de lo que se está consumiendo. “No digo que esté bien o mal, sino que pregunto ¿sos consciente de lo que estás ingiriendo?, ¿leíste las etiquetas, los ingredientes? Y desde el conocimiento uno puede elegir si algo es inocuo o no. Si la respuesta es negativa, vos vas a decidir cuántas veces vas a consumir ese producto, si lo dejás de consumir o ya no lo harás tantas veces”, explicó y luego dio una serie de consejos no solamente sobre alimentación, sino cómo tratar los productos y los elementos de cocción. Pablo empezó a difundir los hábitos saludables de alimentación con su amigo y colega Claudio María Domínguez, “hace unos ocho años cuando no se hablaba en los medios de las propiedades de las semillas, de la clorofila o la espirulina y con él popularizamos mucho esta alimentación y la verdad es que le tengo una gratitud eterna, gracias a él yo crecí un montón”. Actualmente continúan trabajando juntos en Radio 10, Pop y Revista de una vida mejor.

 

“Para arrancar el día, las frutas son lo ideal, ya que son el complemento necesario para una vida sana”, aseguró y contó que el secreto para comerlas con más frecuencia es lavar los vegetales apenas se regresa a la casa desde el supermercado. “Así guardás todo listo para consumir”, aconsejó. “Yo soy muy matero, después de desayunar frutas, ya sea enteras o licuadas, espero veinte o treinta minutos y después agarro el mate, también se puede complementar con granola, un mix de semillas, frutos secos o lo que se desee. Hay mañanas en que arranco con el mate y hago al revés”, deslizó el chef que trabajó en hoteles 5 estrellas de Buenos Aires.

 

 

“Para arrancar el día, las frutas son lo ideal, ya que son el complemento necesario para una vida sana”

 

 

Con respecto a los elementos de cocción, Martín advirtió fuertemente que “lo primero que hay que eliminar es el microondas”, y aseguró que los mejores elementos para cocinar son el vidrio, el barro y el teflón siempre y cuando se haya tratado con cuidado y no supere los dos años de uso. El último puesto se lo lleva el aluminio, ya que puede resultar altamente tóxico. Y en cuanto a los aceites, “el mejor es el de coco, luego seguiría el de oliva virgen, que resiste temperaturas de 90 grados, y finalmente el de girasol y el de maíz”.

 

En sus talleres, a Pablo le gusta interactuar mucho con el público sobre todo hacerle muchas preguntas. La primera, de rigor, es “¿Cuántos colores cenaron ayer?”, y así comienza una larga lista de ingredientes que serán el puntapié inicial de su discurso. “Los colores son fundamentales porque establecen cuántas porciones de frutas o verduras se consumió”, dijo. Es que si uno se hace esa pregunta, ciertamente se llamará a la reflexión.

 

Dentro de sus hábitos y los de su familia (Pablo está casado y tiene un hijo) está evitar todo lo light, ya que “está muy industrializado, muy refinado, y le agregan aspartamo que es un edulcorante artificial que mata neuronas del cerebro. Yo no lo recomiendo”, dijo y agregó que en lugar de estos, elige los productos regulares porque lo light genera adicción y por ende se consume más.

 

 

 

Parado en la vereda del frente de la relación entre un argentino y la carne, Pablo sabía que al principio ir a un asado le resultaría complicado, sobre todo por las preguntas inquisidoras: “Y ahora qué comés?, ¿cómo hacés con la proteína, con el hierro…?’ Yo disfruto de la vida, tengo más energía que antes. Incluso todos los años me hago análisis de sangre pero no porque tenga miedo, sino para demostrarle a esa sociedad que me pregunta, que no me falta ningún nutriente”, aseguró.

 

Con su noveno libro de alimentación sana y recetas en camino, Martín afirma que el único secreto para alimentarse mejor es aprender acerca de los productos y saber leer las etiquetas. Y que para él, el vegetarianismo llegó naturalmente. “Yo era re carnívoro pero llegó un momento en que no la quise más. Y a diferencia de otras personas que se hicieron vegetarianos, yo no recuerdo mi última ingesta de carne”.

 

A partir de allí, comenzó a hacer y a promover recetas, un combo ideal. “Todo esto lo hago en el día a día. A veces me dicen que este tipo de alimentación es más cara, pero no es cierto. Es tres o cuatro veces más económica que la otra”, aseguró. Además para quienes tienen poco tiempo para cocinar, advirtió que en el día a día se utilizan muchos productos enlatados y para el chef, “si comparás el garbanzo en lata con un pancho, por ejemplo, obviamente elijo la lata, pero si la comparación es con productos naturales o congelados, elijo cualquier cosa menos la lata”. En cuanto a los vegetales congelados, dice que son muy buenos y que él los compra. “La primera opción es el producto fresco, en segundo lugar los congelados, ya que si comparás un brócoli envasado versus uno de no estación, es mucho más nutritivo el primero porque la industria lo cosecha en temporada y lo congela en menos de diez minutos, entonces tiene más nutrientes”.

 

Algunos productos que más publicidad tuvieron estos últimos tiempos son las semillas. Para saber aprovechar todos sus nutrientes, Pablo cuenta que hay tres opciones: “La primera –que es la mejor- es activarlas, es decir ponerlas en remojo. Las colocás en un frasco de vidrio con agua, lo tapás y va a la heladera toda la noche. Al día siguiente hay que descartar el líquido y ya están activadas para consumir. La segunda es molerlas para romper su estructura y la tercera se la dejo a la industria porque es más complicada, hay que tostar las semillas, es decir cocinarlas. Si lo hacés bien, está correcto pero si no, las podés quemar y eso es tóxico”, previno. Cualquiera de estas opciones son válidas para empezar a consumir semillas de manera adecuada, pero si se comen enteras, al no masticarlas correctamente, el cuerpo no asimila ningún nutriente.

 

Si bien su alimentación es bastante correcta no es del todo estricta, “tampoco es el delirio místico. No es que yo levito en la montaña. Si yo voy a un cumpleaños o compran una tarta que tiene queso o algún producto industrializado, lo como, pero nada que tenga carne. La idea es que seas impecable en tu casa, en el día a día y que en lo eventual puedas tener un poco de rock and roll, como yo le digo”, aconsejó.

 

Para alguien que quiere mejorar su alimentación, el mejor consejo que da Martín es incorporar alimentos saludables pero no dejar de consumir nada. “Lo digo siempre en todos los talleres, incorporen frutas, semillas, algas y escuchen a su cuerpo y no tanto a su mente. La mente es la que se acuerda de esa última salchicha o asado, pero se puede cambiar. Van a tener más calidad de vida, más energía, no se van a enfermar tanto y el día de mañana no se van a enfermar más”, cerró.

 

 

LIBROS DE “PABLITO” MARTÍN

 

Con probar no perdés nada (2011)
Detrás de los alimentos (2012)
Medicalimentos y Vitanutrientes (2013)
La re-evolución de la cocina (2014)
¡Detené la diabetes! (2015)
Fast Food consciente (2016)

 

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