La familia más famosa de la tele pasea por la Costanera

Quienes visitan el Parque Costanera Río V pueden encontrarse a una de las familias más famosas de la televisión, plasmados en un añejo Peugeot 404. Una de las trabajadoras del predio pintó a Los Simpson a bordo de su auto rosa. La obra se transformó en un gran atractivo para grandes y chicos que llegan de todos lados para sacarse una selfie con los divertidos personajes amarillos.

El Peugeot está ubicado sobre la calle Las Heras, en uno de los ingresos a la costanera. Por allí pasan cientos de personas diariamente que al encontrarse con la figura, no dudan en posar y llevarse un recuerdo a casa. La convocatoria es tanta que algunos hasta se animan a subir al capot para llevarse un retrato mucho más de cerca, aunque eso implique abollar la joya sobre ruedas.

La autora de la obra es Wanda Benítez, una joven artista autodidacta que forma parte del equipo del Parque desde hace un año. Junto a sus compañeros de herrería, les dio vida a los animados vecinos de Springfield.

"En un comienzo la idea era pintar una familia y se me ocurrió que podían ser los Simpson porque son muy conocidos y queridos. Aceptaron la idea y comencé a trabajar", contó Wanda.

Para dejar como nuevo al Peugeot 404, el equipo tuvo que poner en condiciones puertas y ventanas. Luego todo fue trabajo de la joven artista. "Primero pinté el auto de rosa y usé blanco para el fondo de las ventanas. Luego dibujé a los personajes, hice las líneas para saber más o menos como era el diseño y el resto fue imaginación. Llevó una semana aproximadamente para terminarlo", señaló Benítez.

La jefa del Subprograma Parques de Pedernera, Flavia Coria, destacó que el auto fue una donación de Miguel Amante, "un vecino y amigo del parque".

"Venimos trabajando con materiales reciclados y se nos ocurrió que podíamos hacer una imagen que representara a las familias que siempre vienen a tomar mate, hacer deportes o a comer asados", explicó.

A lo largo del predio hay más figuras animadas diseñadas por los propios empleados. "Tenemos dos grupos: uno se encarga de la herrería, que además de diseñar juegos hacen herramientas para el uso diario del parque, y otro que se llama 'Manos creativas', que se dedica a pintar y dibujar. Wanda es una de ellas. Siempre utilizamos cosas que vamos encontrando por ahí o que nos donan como por ejemplo: maderas, hierros, ruedas. De todo un poco", resaltó Coria.

Entre los atractivos resaltan un caballo hecho de tachos de chapa pintados en diversos colores que funciona como hamaca para los más chicos. A pocos pasos de la tradicional Casa Alpina, una araña de patas rojas y negras gigantes se lleva todas las miradas.

"Tenemos planeado armar un espacio verde con macetas que están hechas de neumáticos. Los chicos las han preparado y pintado con diferentes diseños. También hay decoraciones en madera, silloncitos. Todo para que los chicos puedan disfrutar y las familias también", resaltó Coria.