Hermanas rescatadas: citaron al padre a declarar en Tribunales

La jueza de Familia, Niñez y Adolescencia 1, Natalia Giunta, mantuvo este miércoles una audiencia con una de las dos hermanas rescatadas hace dos semanas de una casa del barrio Monseñor Di Pasquo, donde fueron halladas en estado de desnutrición y donde residían en malas condiciones. Dispuso una serie de medidas, entre ellas, una restricción de acercamiento del padre a las jóvenes, y libró una orden para que los familiares que ahora están a cargo de ellas puedan recibir una ayuda económica. El hombre está citado a declarar este jueves a la mañana por la causa que tramita en ese Juzgado. Era quien, en teoría, tenía a su cuidado a estas jóvenes. Días atrás declaró en sede policial que la madre de las chicas las había abandonado al poco tiempo de nacer.

La magistrada tuvo el encuentro por la mañana con J.I., de 24 años, la muchacha que pudo escapar de la vivienda ubicada en Elpidio González al 900 para pedir ayuda. Junto a su hermana L., de 23 años, vivían encerradas en una pieza del patio, en pésimas condiciones.

La jueza Giunta le informó a El Diario que recibió también a Valeria y Brenda Strug, primas de J. y L., quienes se han hecho responsables de ellas. "La chica (por J.) me contó que se encuentra bien y que está contenta. Con base en las necesidades manifestadas por parte de ella y familiares que están a cargo hemos tomado una serie de medidas para que ambas puedan encontrar un bienestar. Continuarán bajo el resguardo de las primas", dijo.

Solo una de las hermanas pudo presentarse. La otra está internada por problemas digestivos.

 

Brenda Strug comentó que J. fue examinada por una médica forense del Poder Judicial. "Confirmó que se encuentra desnutrida y nos dijo que no hay signos de abuso", detalló.

Precisó que L., la otra víctima, no pudo asistir ya que está internada por una complicación digestiva producto de la mala alimentación que tenía. "Vivían peor que un perro. Ellas mismas contaron que el padre las alimentaba solamente con cáscaras de verduras o las sobras de comida", declaró Strug. 

La abogada María Elena Aparicio, de la Secretaría de la Mujer, Diversidad e Igualdad, acompañó ayer a J. y a sus primas a Tribunales, ya que les brinda asesoramiento. "Nos hemos puesto a disposición para darles la contención que necesitan", expresó.

Aparicio también fue parte de la audiencia y precisó que la jueza solicitó una “batería de medidas” para ahondar en la investigación. "Entre ellas, pidió la Cámara Gesell y tratamiento psicológico. También se ha iniciado un trámite para que se puedan integrar al mundo escolar, ya que se desconoce si en algún momento han concurrido", refirió la letrada.