Desiré Blair presenta “Reina de mi corazón”, su segunda novela

Daiana es una joven transgénero que vive en la ciudad de La Punta y busca un lugar en el mundo de la literatura. Sin embargo, en el medio aparecerán prejuicios y desilusiones que intentarán frenar sus deseos más profundos de ser escritora. Además, en medio de esos conflictos, nacerá un romance inesperado.

La historia de la joven es el resultado de la recopilación de muchas vivencias de mujeres de la comunidad LGBTIQ+ de San Luis. Y la encargada de darle voz al personaje ficticio, construido con pedacitos de realidades, es Desiré Castaño, conocida bajo el seudónimo de Desiré Blair, una escritora que este jueves lanza su segundo libro.

“Soy Desiré, soy una mujer trans y escritora”. Así y en ese orden se autodescribe la autora de “Reina de mi corazón”, la novela que se conocerá a través de sus redes sociales. Si bien había pensado promocionar su libro con un encuentro presencial, a causa de la pandemia decidió mostrarlo por primera vez de manera virtual con un vivo, a las 18, en su Instagram @desire.blair.

Luego, quienes deseen podrán comunicarse por el mismo medio con la escritora para comprar la versión física o digital de la novela que tiene amor, comedia, drama y sobre todo, una imperante necesidad de derribar estereotipos.

“Siempre quise mostrar y demostrar la gran diversidad que hay en la literatura, creo que tenemos referentes, pero siempre van a un mismo género. En mi caso quiero mostrar que puedo ser una mujer trans y hacer ciencia ficción, fantasía o, en este caso, una historia romántica”, detalló la puntana de 30 años que escribió “Reina de mi corazón” en el verano.

Para Desiré escribir su segunda novela —la primera es “La bruja asesina”— fue una tarea no sencilla, pero sí natural. La historia de Daiana está hace años en la cabeza de la escritora, pero recién ahora se animó a plasmarla en papel y darla a conocer. Para eso recopiló una serie de entrevistas informales con mujeres transgénero de la provincia que sirvieron como fuente de inspiración.

“La novela se sitúa en La Punta, creo que el tema de las restricciones hace que sí o sí tengamos que inspirarnos en donde estamos. Además, los lugares son protagonistas en sí, sumado a que me pareció bueno mostrar la ciudad donde vivo”, explicó la novelista que fantaseaba con mundos imaginarios e historias en cuadernos que le compraban sus padres desde los diez años.

El punto de inflexión para dedicarse a la literatura ocurrió cuando tenía 15 años, luego de que falleciera su padre. "Mi amor por la escritura se consolidó en ese momento, ya que la utilizaba como forma de canalizar mi dolor y expresar cuánto lo extrañaba. En ese momento no tenía una formación, después hice cursos, empecé a escribir con una prosa determinada y con el tiempo descubrí que era lo que realmente me gustaba hacer".