La UNSL analiza implementar un sistema de retiro voluntario

Luego de transitar durante más de un año por la pandemia, la UNSL anunció que tomará medidas para amoldarse a la situación sanitaria que alteró el funcionamiento del área administrativa y técnica de la casa de estudios. El rector, Víctor Moriñigo, indicó que una de las alternativas que analizan implementar es un sistema de retiro voluntario para los trabajadores que están de licencia desde la irrupción del coronavirus en el país, en marzo de 2020, ante la eventual continuidad de la emergencia sanitaria.

Así lo informó la máxima autoridad universitaria esta semana ante el Consejo Superior, durante la última sesión que mantuvo el martes el órgano de cogobierno. Allí, planteó la necesidad de conocer la cantidad de empleados que gozan de la exención de concurrir a sus puestos laborales por integrar grupos de riesgo.

"Tenemos que tomar decisiones de fondo con el personal que está en una licencia larga en cumplimiento del decreto nacional, que vamos a seguir acatando, pero queremos conocer dónde están esas personas, con cuántas contamos de manera activa y durante el segundo semestre quizás la universidad iniciará políticas tendientes a, por ejemplo, generar una figura de retiro voluntario que tal vez sea acogida por varios de estos empleados", sostuvo Moriñigo, quien agregó que la implementación de una medida de esas características le permitiría a la institución incorporar a los trabajadores que en la actualidad realizan de manera efectiva las tareas correspondientes al personal licenciado.

Además, señaló que ya realizaron la presentación ante la Asociación del Personal de la Universidad Nacional de San Luis (Apunsl), gremio con el que lanzaron de manera conjunta un censo sanitario para conocer la cantidad de trabajadores no docentes que aún no cuentan con la vacuna contra la COVID-19. Y en el caso de los que ya fueron inoculados, contar con un registro de los que aún les resta aplicarse la segunda dosis.

El rector de la UNSL dijo que ese relevamiento servirá también para saber sobre el personal de más de 60 años que tiene licencia, para que una vez que sea inmunizado, pedirle que vuelva a su puesto de trabajo. "Es algo que va a iniciar a partir de agosto. Vamos a tomarnos estos 60 días para reunir esta información del pedido de vacuna y analizar la situación", afirmó Moriñigo, quien adelantó que analizarán cada caso en particular.