Indicando el camino

Hace poco más de tres meses la Universidad de La Punta puso en marcha el primer observatorio de la deuda pública de Argentina. A su mando fue nombrado el especialista en esta temática, y reconocido en toda la región, Alejandro Olmos Gaona, dotando al mismo de un prestigio que en estas líneas es innecesario detallar.

En otro hito en su devenir desde que el observatorio fue presentado en sociedad, la semana pasada, con la participación de Alberto Rodríguez Saá, se hizo lo propio en el Congreso de la Nación.

Al mismo tiempo, un grupo de diputados presentó un proyecto de ley para impulsar la creación de una Comisión Bicameral encargada de investigar sobre la deuda. Puntualmente sobre el acuerdo Stand By (de alta disponibilidad) celebrado entre la República Argentina y el Fondo Monetario Internacional en 2018.

El préstamo otorgado en 2018 a la Argentina tiene algunas características que lo distinguen de los demás cuanto menos y otras discutidas por su legalidad, mejor aún ilegalidad.

A saber: el monto (57 mil millones de dólares) es el más oneroso contraído por la República y el más oneroso otorgado por el organismo multilateral que comprometió, por aquel entonces, el 60% de su capacidad crediticia con Argentina; el Ejecutivo no cumplió con las obligaciones impresas en la Ley de Administración Financiera; la deuda fue contraída obviando la aprobación, incluso la mínima participación, del Congreso de la Nación, cláusula incluida en la Constitución Nacional respecto de endeudamiento interno y externo; el acuerdo Stand By incluye condiciones secretas que habilitan inspecciones y correcciones cualitativas y cuantitativas en materia fiscal, entre otras.

Así, con un simple “acuerdo de alta disponibilidad” comunicado por medio de escuetas intervenciones en los medios, es que se condicionó la macroeconomía a revisiones periódicas de un organismo multilateral capaces de digitar márgenes de gastos a la administración de la República. En pocas palabras: pérdida de soberanía.

El dictamen de una Comisión Bicameral sería fundamental para avanzar en el esclarecimiento público de esa materia tan oscura llamada deuda, objetivo que se ha trazado el Observatorio de la Deuda Pública.

Iniciativas desde espacios institucionales de gran importancia son las que escasean.

La Universidad de La Punta y el Observatorio de la Deuda Pública muestran el camino.