"Mi sueño es participar en el circuito mundial de seven"

Nerea Livoni integró la legión puntana en los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile. La puntana estuvo en su rol de réferi y, por sus destacadas actuaciones, fue la árbitra de la final femenina que Estados Unidos le ganó 19-12 a Canadá. Luego de su buena performance, Nerea le dio un mano a mano a El Diario y reveló su objetivo: estar en el circuito mundial de rugby seven.

"Estoy feliz, estos desafíos son muy importantes para seguir creciendo profesionalmente. Este fue mi segundo Panamericano, la primera experiencia fue en el de Lima 2019", detalló la exjugadora de Chancay Rugby Club, quien, previo a los Panamericanos, arbitró en el Challenger Series de la World Rugby Seven, que también se disputó en Chile y que es clasificatorio para el circuito mundial de la especialidad.

Con respecto a las sensaciones que le dejaron estos Juegos, dijo: "Estaba esperando este torneo y me venía preparando durante el año. Desde que me avisaron de la designación, estos últimos dos meses fueron de muchísimo trabajo, tanto en la provincia como en torneos nacionales y sudamericanos. Lo bueno es que salió todo tal cual lo veníamos trabajando".

La convocatoria le llegó por parte de World Rugby y Sudamérica Rugby, que son los entes que arman el cuerpo técnico de réferis. "Para mí, esta convocatoria fue muy importante, porque reafirmó el trabajo que vengo haciendo hace años. También es sumamente importante, ya que fui la única mujer de la región", detalló la árbitra.

En referencia a su tarea estrictamente y el rol de dirigir, comentó: "No hay alguna parte del partido que sea más difícil que otra, simplemente son dos equipos que ingresan con un mismo objetivo, y mi trabajo es estar solo para que el juego sea lo más legal posible pasando desapercibida".

El balance fue más que positivo: "Creo que el primer día hice grandes partidos, lo que terminó generando que me den la final femenina. Voy transitando un gran camino desde que me inicié en el arbitraje, aun siendo jugadora; el interés fue, principalmente, porque estaba como capitana de Chancay y sabía que jugando con el conocimiento del reglamento jugaba con ventaja".

La puntana está en pleno ascenso y seguramente le esperan desafíos enormes. A Nerea, de 31 años, le restan objetivos por concretar: "Mi sueño es participar en una temporada del circuito mundial de seven; seguiré trabajando y esforzándome para lograrlo".