Una cooperativa celebró con la comunidad que la acompañó en su lucha

En una tarde llena de alegría, música y diversión, los mercedinos festejaron este jueves el tercer aniversario de la Cooperativa 20 de Julio, ubicada en 25 de Mayo y Juan Llerena. El evento gratuito ofreció shows de baile, opciones para merendar y una torta.

La risa de los niños inundó la jornada de ternura; disfrutaron al máximo los peloteros y espectáculos. También degustaron algodones de azúcar, pochoclos y chocolate.

Marcos Lucas Giudicce, quien forma parte del equipo, expresó su alegría de poder festejar junto a la comunidad. También comentó que hace casi trece años está dentro del rubro, principalmente en el sector de atención al público.

Puedo traer a mi segunda hija a trabajar y es hermoso, porque como mamá me da mucha tranquilidad (Florencia Novillo, integrante de la cooperativa)

Una mesa con regalos fue protagonista de los sorteos que se realizaron en vivo. Para participar, los presentes debieron donar un alimento no perecedero. Todo lo recaudado fue entregado al comedor Adulam, que alimenta a más de seiscientas familias y tiene casa central en el barrio Ciudad Jardín.

Dante Valdez, referente del espacio social, dijo que el vínculo con el grupo se forjó en el 2020. “Los ayudamos llevándoles comida para colaborar con lo que estaban pasando”, expresó y contó que la panadería colabora todas las semanas con ellos.

La casa de panificación empezó su proceso de lucha en pandemia, lo que precisó de mucho esfuerzo y perseverancia para no bajar los brazos. “A pesar del miedo, la incertidumbre y la angustia, había que seguir y una gran parte fue gracias a la respuesta de la gente, que desde el comienzo nos vino a comprar; creo que ese apoyo ha sido fundamental para que hoy podamos celebrar un año más”, dijo Giudicce.

El espíritu cooperativista no es simplemente aventurarse, sino que representa un proceso de humanización (Marcos Lucas Giudicce, integrante de la cooperativa)

Florencia Novillo es otra de las referentes y contó cómo fue su experiencia de trabajo como madre antes y después de la cooperativa. “Cuando trabajaba en Las Camelias, mi primer hijo pasó mucho tiempo en guarderías y con niñeras. Ahora puedo traer a mi segunda hija acá y es hermoso, porque como mamá me da mucha tranquilidad”, manifestó emocionada.

Los compañeros coincidieron en que festejar con los vecinos, que tanto los acompañaron en el camino, es una forma de mostrar su agradecimiento.

“El espíritu cooperativista no es simplemente aventurarse, sino que representa un proceso de humanización”, concluyó Giudicce.

Los acompañaron el intendente de la ciudad Maximiliano Frontera, los candidatos a diputado y senador nacional Ernesto “Pipi” Ali y Fernando Salino, y el jefe de campaña de Unidos por San Luis, Jorge “Gato” Fernández.

El camino para lograr un sistema de empleo distinto

El 20 de julio de 2020, los empleados de la, por entonces, panadería Las Camelias decidieron tomar el local que, hasta ese momento, era su lugar de trabajo. Iniciaron así un camino de lucha que se extiende hasta la actualidad, para mantener sus fuentes de empleo y cortar los vínculos contra sus antiguos patrones, que se caracterizaban por la precarización y la falta de pagos.

Desde entonces, los trabajadores forman la cooperativa que fue bautizada con aquella fecha. Una de sus grandes particularidades es que forma parte de las 400 que hay en todo el país que se conformaron a raíz de una empresa recuperada.

Además, se caracterizan por un sistema laboral que no tiene jerarquías, sino representantes, y en el que la división de las tareas y de las ganancias son totalmente equitativas entre todos los miembros.