UPrO: entregan créditos blandos a los graduados

El miércoles la Universidad Provincial de Oficios (UPrO) entregó la primera tanda de créditos blandos a diecinueve egresados locales. Los préstamos son de hasta un millón de pesos y pueden devolverse hasta en cuarenta y ocho cuotas. La propuesta busca que los nuevos profesionales puedan invertir en sus negocios luego de graduarse.

En esta primera etapa serán cincuenta personas en total. Jessica Douglas Price, jefa del Programa Inserción del Graduado al Mercado Laboral, aseguró que actualmente están en evaluación treinta y un beneficiarios.

“Es un impulso que les damos para mejorar la calidad del servicio que ofrecen y para que quien recién arranca lo pueda hacer un poco mejor. Sabemos que hoy el país no nos acompaña con todo lo económico, entonces esto les va a facilitar algo a la hora de invertir”, indicó y remarcó que quieren sumar un granito de arena a su realidad diaria.

La funcionaria reveló que la mayoría solicitó un millón de pesos y que optaron por devolverlo en un plazo de dos años. Además, indicó que quienes pidieron menos, como setecientos mil, y eligieron los planes más largos con pequeños intereses es por temor a no poder abonar una cuota alta.

Para seleccionar el monto, los interesados tuvieron que realizar una evaluación por medio de un flujo de fondos que les pidieron como requisito para acceder. Consistió en visualizar cómo va su negocio y cuánto piensan vender, entre otros detalles que les permitieron decidir la cantidad de dinero a solicitar y determinar la forma de devolución.

Entre los beneficiados hubo variedad de oficios: graduados en Carpintería de MDF y Metálica, Imagen Personal y Masajista, entre otros. También hubo exalumnos que ya tienen emprendimientos y otros que realizan tareas vinculadas a su carrera y necesitan herramientas y diversos elementos.

“Las personas están muy agradecidas. Retomo lo que siempre dice el rector: es como el cierre a un círculo que tiene que ver con haber ingresado a estudiar a la UPrO, egresarse y así nosotros poder colaborar en esa inserción de ellos al mercado laboral”, manifestó Douglas Price.

Antes de comenzar a pagar la ayuda económica, los exalumnos tienen nueve meses de gracia. El primer plan es de veinticuatro cuotas sin interés; otro, de treinta y seis cuotas con un 12% de interés anual, y, por último, hay uno de cuarenta y ocho pagos, con una tasa de 18% anual.

"Las entregas son eventos bastante emocionantes, porque la gente está muy agradecida no solo con la ayuda, sino también con su paso por la institución y por la calidad de los profesores que tuvieron", cerró la funcionaria.

► Ofrecieron subsidios de hasta $500 mil

 La casa de estudios, además de los créditos blandos, otorgó meses atrás aportes no reintegrables a egresados que estuvieron interesados en invertir para sus emprendimientos.

El beneficio podía ser percibido en dinero, materiales o insumos, según cada necesidad que requería el oficio solicitante.

También crearon un registro con todos los proyectos laborales que llevaron adelante quienes ya están recibidos de las diferentes tecnicaturas, cursos y especializaciones que dicta la universidad desde sus comienzos para tenerlos en cuenta.

Por otra parte, formaron una comisión interdisciplinaria que les brindó asesoramiento a los interesados con sus diversas propuestas; las mismas podían ser nuevas o ya estar en funcionamiento.

Evaluaron cada caso y sus respectivas necesidades para poder brindarles las herramientas económicas y materiales que mejor se adecuaban.

Redacción / NTV