Taxistas siguen sin respuestas ante el funcionamiento de Uber

A un mes de una protesta que se hizo sentir en la capital, taxistas aseguran que no les han brindado soluciones por el uso de Uber. La aplicación, que de acuerdo a las normas vigentes no está permitida, sigue funcionando a pesar de los reclamos de los “tacheros”, y a esto se le suma la apatía que parecen mostrar las autoridades a cargo.

En el sector dicen que a nivel provincial se desentendieron del tema, y que en el ámbito municipal les indicaron que por la supuesta “crisis” que atraviesa la Comuna, recién podrían hacer controles a fin de mes.

Alberto Muñoz, secretario general del Sindicato de Peones de Taxis, detalló que esta semana entabló conversaciones con otras asociaciones del rubro como Acotax, de Titulares y Autoconvocados, para evaluar las próximas medidas a tomar.

En mejores o peores términos, los funcionarios a cargo dieron respuestas insuficientes. Señaló que el encuentro más tenso fue con el secretario de Transporte del Gobierno de San Luis, Víctor Cianchino. “Él nos dijo que ellos no van a hacer ningún tipo de control. Fue una reunión que terminó mal”, recordó Muñoz.

“Nos dijo que él estaba acostumbrado a pelear con la UTA y no tenía problemas en pelearse con nosotros, que si quería él, a las 17 horas, dejaba de ser funcionario, que lo esperemos afuera y lo arreglábamos de otra forma”, dijo el taxista.

En cuanto al Municipio, el encuentro con el intendente Gastón Hissa fue en mejores términos, pero allí el intendente ahondó en el relato de la Municipalidad “en crisis” a pesar de haberse registrado una transición ordenada con el intendente saliente Sergio Tamayo.

“Hemos podido charlar con el intendente. Nos dijo que desde que asumió, el primer mes la mitad del personal estaba de vacaciones y en enero se fue la otra mitad. A su vez, dijo que había problemas de movilidad, con motos, autos rotos y una sola grúa y que lo banquemos que en la última semana de febrero o primeras de marzo íbamos a poder ver qué hacíamos con Uber”, detalló sobre su diálogo con el jefe comunal que responde a Claudio Poggi.

Usualmente la temporada de verano baja la demanda de taxis, ya que inician las vacaciones de gran parte de los vecinos. Ahora, deben sumarle lo que ellos consideran la “competencia desleal” de las apps y la crisis económica en la que está inmersa Argentina.

“En el taxi a nivel nacional está ocurriendo una baja de trabajo muy significativa del 50 al 60 por ciento. Yo hablo con chicos de todo el país y es crítico en todos lados. Esto se debe no solo a la competencia de Uber. Por ejemplo, acá lo que afectó mucho es el desdoblamiento de sueldo de los estatales”, describió.

Entre lo que se consideran como desigualdades entre el servicio de taxis y el Uber, está el precio, (que de acuerdo a registros de este medio, a veces es hasta 50% más económico en la app), pero también toda la batería de permisos y habilitaciones que debe sacar un taxista para conducir.

Esto incluye una renovación anual, desinfecciones bimestrales y controles técnicos cuatrimestrales. A su vez, los titulares necesitan libreta sanitaria y carnet profesional.

Uber, en cambio, de acuerdo a su propia página web, solo solicita mayoría de edad (18 años), licencia de conducir profesional, cédula del auto, comprobante de seguro del vehículo y foto del conductor. “Nos hemos empezado a reunir de todas las asociaciones de a poco. Yo creo que entre el jueves y viernes vamos a tomar decisiones de cómo seguir”, concluyó Muñoz.

 Redacción / NTV