Pusieron tarifas excesivas para utilizar la Villa Deportiva

Si bien hace un tiempo el gobierno provincial pregonaba que "con el objetivo de promover un estilo de vida activo y saludable, la Villa Deportiva espera a todos los vecinos de San Luis con una amplia gama de actividades", ahora los vecinos que quieran usar las instalaciones deberán abonar un alto costo.

La Resolución 17 de la Secretaría de Estado de Deporte, fechada el 9 de abril pero que tomó estado público en las últimas horas, hace un detalle con las excesivas tarifas que deberán pagar los puntanos por utilizar las distintas canchas que existen en la Villa Deportiva.

Esta resolución viene de la mano de la aprobación anterior del Reglamento de Uso de Espacios, Complejos y Predios Deportivos.

Este reglamento esencialmente faculta a Rivero a disponer, generar u organizar actividades gratuitas o aranceladas en cualquier espacio, complejo o predio dependiente de la Secretaría de Deporte.

Por ahora solo se conocieron las tarifas de la Villa Deportiva en seis disciplinas que allí se pueden practicar, y deja claro en el punto G que "en otros espacios, eventos o actividades, el monto a abonar será fijado por otra resolución".

Por ejemplo, los amantes del pádel deberán pagar seis mil pesos por utilizar una hora la cancha de blindex con iluminación, y cuatro mil quinientos si no requiere de luz artificial.

Todas las canchas de fútbol fueron aranceladas. En la modalidad de cinco participantes por equipo el monto es de once mil quinientos pesos de día y catorce mil si es de noche.

Las de fútbol 7 se incrementan un poco más, siendo el costo quince mil quinientos sin iluminación y diecisiete mil de noche.

Los deportes con canchas reglamentarias de fútbol 11, el rugby o el hockey tendrán que abonar la misma tarifa. La resolución establece que se deberá abonar por hora veintitrés mil pesos sin iluminación y la suma asciende a veinticinco mil con iluminación.

En la Villa Deportiva disfrutaron, hasta hace poco, las familias enteras. Y gratis, como corresponde a un Estado contenedor. Ahora, si quieren jugar, deberán pagar un alto precio.